Finalmente, Europa sale en defensa de su industria siderúrgica frente a la china. La CE ha impuesto un arancel definitivo de entre el 18,4% y el 22,5% que se mantendrá durante los próximos cinco años a las importaciones de barras de refuerzo para construcciones procedentes de China por vender el material por debajo del precio de coste de producción, una práctica conocida como 'dumping'.
Se trata de un tipo barras de alta resistencia que se utilizan en Reino Unido e Irlanda y que se producen en varios países de la UE. El Ejecutivo comunitario abrió una investigación sobre las barras de acero chinas en abril de 2015 tras recibir una denuncia de la industria europea y adoptó medidas provisionales el 29 de enero de este año, aunque solo ahora aprueba un arancel definitivo, de entre el 18.4% al 22.5%, que estará en vigor cinco años.
La UE está autorizada a aplicar aranceles a productos de terceros países en respuesta a sus prácticas de dumping si se demuestra a raíz de una investigación que estos productos que entran en el mercado europeo a precios por debajo del coste están perjudicando a la industria europea, según las normas de la Organización Mundial del Comercio (OMC). Bruselas tiene en marcha una quincena de investigación sobre este tipo de prácticas en el caso de productos de acero y ha impuesto 37 medidas para proteger a la industria europea.