Con el gasto en pensiones marcando máximos históricos, el PSOE quiere poner toda la carne en el asador para tratar de conformar su Gobierno progresista y blindar en la Constitución el Sistema Público de Pensiones.
Pero, además, promete acabar con el Factor de Sostenibilidad y el Índice de Revalorización del Sistema de Pensiones de la Seguridad Social que se aprobaron durante el Gobierno de Mariano Rajoy, en la última reforma del sistema, en el año 2013, cuando en un momento de incipiente recuperación económica se asumió la demanda de organismos internacionales de controlar el gasto en Pensiones.
Así lo establece el documento de 370 medidas que ha presentado el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, como aspirante a revalidar su mandato si logra cerrar su investidura.
"Estamos comprometidos con la actualización de las pensiones de acuerdo con la evolución del IPC real, aumentando en mayor medida las pensiones mínimas y las no contributivas", reza también el documento en su medida número 29.
Junto con las pensiones, el empleo tiene un elevado protagonismo en este programa de Gobierno que el PSOE quiere que Podemos acepte. Tanto es así que las primeras medidas que presenta el texto del Programa Común Progresista son las relativas a la materia laboral, justo en este momento en el que los datos del paro son preocupantes.
Revertir la reforma laboral
Pedro Sánchez promete a los partidos de izquierda, una vez más, eliminar los aspectos más lesivos de la reforma laboral. Pero también incorpora nuevas medidas en este documento, como, por ejemplo, regular el derecho a la desconexión digital del trabajo. Una idea que pretende importar de Francia, puesto que fue el presidente galo, Emmanuel Macron, quien la puso sobre la mesa en primer lugar.
También se compromete a incorporar otras medidas, como regular el horario de trabajo en los contratos a tiempo parcial y otras demandas de los sindicatos como reforzar el principio de causalidad en la contratación para que la contratación indefinida sea la forma ordinaria de acceso al empleo.
No se olvida el documento de hacer guiños a los funcionarios, al prometer una revisión en el contrato de interinidad en las Administraciones Públicas para evitar su "uso abusivo" o la promoción profesional del cuerpo de la Administración Pública, así como el desarrollo de un Estatuto Básico del Empleado Público.
Más gasto público
El programa del PSOE insiste en su deseo de elevar el volumen de gasto público sobre el PIB al señalar que "se encuentra por debajo de los países más avanzados de la Unión europea. En concreto, en un 41% del PIB frente al 47% registrado en la Eurozona en 2017, el 56,4% de Francia o el 54,2% de Finlandia".
En materia de recaudación se reafirma en su idea de "recuperar la progresividad del sistema, haciendo que quienes más capacidad económica tienen contribuyan en mayor medida".
En ese sentido, la propuesta del PSOE incorpora medidas ya prometidas, como las conocidas 'tasa Tobin' o ' tasa Google'. Además, vuelve a insistir en la reforma del Impuesto sobre Sociedades para garantizar una tributación mínima del 15% de las grandes corporaciones que se ampliará hasta el 18% para la banca y las empresas de hidrocarburos.
El texto es más extenso que el España Avanza que Sánchez presentó para su primer intento de investidura fallida. Por ello, incorpora otras ideas en las que el Ejecutivo está trabajando como la "unidad central de coordinación de las actuaciones de control de los contribuyentes" o reforzar el trabajo de la Autoridad Fiscal Independiente (Airef) para ahondar en los informes sobre el uso del gasto público que viene realizando, conocidos como Spending Review.