El Tesoro Público ha colocado este jueves 4.572,5 millones de euros en bonos y obligaciones del Estado, en el rango medio previsto, y lo ha hecho registrando tipos más bajos en su primera subasta tras el acuerdo alcanzado el pasado 21 de julio en el Consejo Europeo sobre el fondo de reconstrucción.
La demanda ha superado ampliamente lo colocado en los mercados, ya que las peticiones se han situado por encima de los 10.519,93 millones de euros, más del doble de lo finalmente adjudicado, lo que demuestra el interés por los títulos de deuda española.
De esta forma, el organismo dependiente del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital ha vuelto una vez más con éxito a los mercados tras el acuerdo histórico alcanzado el pasado 21 de julio entre los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea para crear un fondo de recuperación de 750.000 millones (390.000 millones en transferencias y 360.000 millones en préstamos), de los que España se beneficiará de 140.000 millones (72.200 millones en transferencias).
También ha sido la primera emisión tras conocerse el viernes que el PIB español cayó un 18,5% trimestral en el segundo trimestre del año como consecuencia de la crisis del Covid y de publicarse el jueves que el déficit del Estado se disparó hasta los 48.767 millones de euros en el primer semestre del año, el equivalente al 4,36% del PIB, quintuplicándose respecto al año pasado.
En detalle, ha colocado 979,28 millones de euros en bonos a 3 años, frente a una demanda de 3.969,41 millones de euros, con un tipo de interés marginal del -0,379%, por lo que ha cobrado más a los inversores por este papel, ya que la referencia era el -0,223% de la subasta del pasado 18 de junio.
Con las obligaciones a 10 años indexadas a la inflación ha emitido 598,2 millones de euros, frente a unas peticiones de 1.043,2 millones de euros, con un interés negativo del -0,768%, moderándose respecto al -0,907% del 6 de febrero, en tanto que en las obligaciones a 10 años no indexadas ha captado 1.016,05 millones de euros, cifra triplicada por la demanda (3.083 millones de euros). En este caso el interés marginal se ha situado en el 0,274%, casi la mitad que el tipo del 0,458% de la emisión del pasado 2 de febrero.
Por último, ha colocado 1.979 millones de euros con las obligaciones a 7 años, con una demanda de 2.424 millones de euros, y la rentabilidad marginal ha entrado en terreno negativo por la mínima, con un interés del -0,001%. En la referencia similar del pasado 7 de mayo el interés fue del 0,633%.
Tras la subasta de este jueves, el Tesoro tiene programadas otras tres en agosto, de letras a 6 y 12 meses el martes día 11, otra de bonos y obligaciones el jueves día 20 y una última de letras a 3 y 9 meses el martes día 25.
El organismo emisor anunció a finales de mayo una modificación de su programa de financiación para este año, que prevé elevar la emisión neta en 97.500 millones de euros, hasta un total de 130.000 millones, e incrementar en algo más de 100.000 millones la emisión bruta, hasta alcanzar los 297.000 millones de euros, como consecuencia de la mayor necesidad de financiación por el aumento de la deuda pública para hacer frente a los mayores gastos derivados del Covid-19.
No obstante, a la previsión de emisión neta se le podrían descontar en torno a 15.000 millones que podría recibir España del sistema de reaseguro de empleo (SURE), así como la parte que perciba del fondo de reconstrucción europeo.
En detalle, estima una necesidad de financiación bruta para 2020 de 297.657 millones de euros, de los que 185.969 millones se prevén financiar mediante bonos y obligaciones y 111.688 a través de letras del Tesoro.