La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha instado a los gobiernos a que mantengan sus estímulos fiscales durante todo 2021 y ha alertado de los peligros de tratar de equilibrar las finanzas públicas antes de tiempo.
La economista jefe del organismo, Laurence Boone, ha recomendado a los responsables políticos que no repitan "los errores fiscales de la última crisis", cuando se retiraron pronto los estímulos y se dificultó la senda de recuperación.
"Ya habrá tiempo de ajustar las finanzas públicas, pero ese momento no es 2021", ha subrayado la economista durante la rueda de prensa que ha celebrado la OCDE con motivo de la publicación de sus nuevas perspectivas económicas mundiales.
Preguntada sobre qué deberían hacer países como España o Italia, que han registrado déficits públicos constantes en los últimos años, Boone ha matizado que la recomendación de la OCDE es para que el dinero "vaya donde sea necesario".
Asimismo, también ha agregado para que el caso de economías que tienen poco margen de maniobra fiscal, por los déficits y su elevada ratio de deuda, "tenemos el dinero europeo". Boone ha indicado que el fondo de recuperación de la UE cambia mucho la perspectiva en comparación con la última crisis financiera.
El club de países ha revisado este miércoles al alza sus previsiones económicas mundiales en comparación con junio. Así, la OCDE estima ahora que el PIB mundial se contraerá un 4,5%, frente al 6% que estimaba hace apenas tres meses.
Este descenso, con respecto a las proyecciones previas a la pandemia, supone que la economía mundial a finales de 2021 todavía estará siete billones de dólares (5,892 billones de euros) por debajo de lo previsto a finales de 2019. Esta previsión podría reducirse hasta cuatro billones (3,367 billones de euros) en el escenario más optimista, aunque podría ampliarse hasta 11 billones (9,259 billones de euros) en caso de que durante el año que viene siga sin estar disponible una vacuna y continúen los rebrotes del virus.
"El PIB de muchos países estará, a finales de 2021, por debajo de los niveles de 2019 y muy por debajo de lo esperado antes de la pandemia", ha explicado Boone.
Estimaciones
Con respecto al conjunto de la eurozona, la OCDE estima que su PIB se contraerá un 7,9% en 2020, frente a la caída del 9,1% que pronosticó en junio. La recuperación en 2021, sin embargo, será 1,4 puntos peor de la esperado, con un crecimiento del PIB del 5,1%.
La OCDE únicamente desglosa las previsiones para las tres principales economías europeas. En el caso de Alemania, su PIB caerá un 5,4% en 2020 y crecerá un 4,6% en 2021. Se trata de una revisión de 1,2 puntos al alza y a la baja, respectivamente.
De su lado, Francia experimentará un shock del 9,5% del PIB este año, frente al 11,4% estimado en junio. Para 2021, la OCDE estima que crezca un 5,8%, lo que equivale a 1,8 puntos menos. Italia, en cambio, caerá un 10,5%, frente al 11,3% anterior, y repuntará un 5,4% en 2021, 2,3 puntos menos.
En lo que se refiere al resto de grandes economías mundiales, Estados Unidos se contraerá un 3,8% en 2020, en comparación con la caída el 7,3% estimada anteriormente, al tiempo que en 2021 crecerá un 4%, apenas una décima menos. China crecerá un 1,8% en 2020, frente a la caída estimada en junio del 2,6%, y en 2021 repuntará un 8%, más de un punto adicional.
Reino Unido será uno de los países desarrollados más afectados, ya que su PIB caerá un 10,1% este año. En junio, el descenso estimado era del 11,5%. Para 2021, la OCDE ha revisado a la baja en 1,4 puntos su estimación de crecimiento, hasta el 7,6%. Asimismo, mientras Japón descenderá un 5,8% este año, una mejora de dos décimas con respecto a junio, su economía será de las que menos crezca en 2021, con un alza del 1,5%, seis décimas menos de lo previsto anteriormente.