La cuenta atrás para conocer los Presupuestos de la Junta de Andalucía de 2021 está a punto de agotarse. El propio presidente del Gobierno andaluz, Juanma Moreno, aseguraba en sede parlamentaria que ya cuentan con un primer borrador del texto mientras que el consejero de Hacienda, Juan Bravo, confiaba en presentar el anteproyecto antes de noviembre.
De hecho, el pasado viernes la Comisión General de Viceconsejeros del Ejecutivo andaluz ha dado luz verde a este borrador del articulado del anteproyecto de Ley de Presupuestos de Andalucía para 2021.
Independientemente del baile de fechas, estos Presupuestos serán determinantes para el futuro de Andalucía por la incidencia en el plano social y económico que ha tenido y tiene la pandemia de la Covid-19. Por ello, la Junta de Andalucía se ha marcado un objetivo claro: brindar el Estado de bienestar, apostando por la educación, sanidad y políticas sociales.
Así lo han confirmado fuentes de la Consejería de Hacienda a Invertia que han recordado que antes de la pandemia ya se incrementaron las partidas en educación (650 millones de euros más que en 2018), sanidad (1.200 millones de euros más) y políticas sociales (130 millones más en dependencia).
En este sentido, la Consejería estima que la cifra del presupuesto será similar al ejercicio anterior, con unos 38.500 millones de euros. Sin embargo, para zanjar la confección del documento, desde Hacienda inciden en la falta de información por parte del Gobierno central. “Sueldos de los funcionarios, los fondos React EU o la senda de déficit para planificar los próximos ejercicios”, apuntan.
Con ello, desempeña un papel clave el anuncio del Ministerio de Hacienda sobre la tasa de referencia del déficit del 2,2% para las CCAA. “La tasa de referencia será un compromiso”, afirman desde la Junta a Invertia mientras subrayan que se debe volver a la estabilidad presupuestaria del déficit cero.
Sin datos concretos
Por otra parte, el Ejecutivo autonómico ha subrayado la falta de datos concretos por parte del Ministerio de Hacienda, liderado por la andaluza María Jesús Montero. Esta queja la hacen por el reparto de los fondos React EU y Next Generation, en ambos casos sin una hoja de ruta ni cifras definidas, a juicio de los andaluces.
También la reclamación de una financiación autonómica “justa” sigue estando encima de la mesa. Desde la Junta cifran la “infrafinanciación” en 900 millones y creen que es el momento de su reforma. La ministra se comprometió a presentar un esqueleto en octubre de 2020 pero, y ante la pandemia, Andalucía ve viable un mecanismo de nivelación que mejore la financiación de las CCAA infrafinanciadas para el acceso igualitario a los servicios públicos.
Y mientras tanto, el Gobierno andaluz confía en mantener la senda de la bajada de impuestos. “Hemos demostrado que, con medidas como ésta, la recaudación no bajó, sino que subió” explican desde la Consejería de Hacienda que recuerdan que la bajada no es la única fórmula, también la transformación digital o la simplificación administrativa.
Negociación política
Otra cuestión es la negociación política. Juanma Moreno quiere que en unas circunstancias excepcionales como las actuales se apruebe un presupuesto excepcional con el consenso de todas las fuerzas políticas.
Hace unas semanas el consejero de Hacienda comenzó una ronda de reuniones con los distintos grupos en el Parlamento y ninguno de ellos ha puesto líneas rojas para negociar.
El escollo está con el PSOE y Adelante Andalucía. Las condiciones de los socialistas pasan por el blindaje de los servicios públicos y por una apuesta concreta para luchar contra la crisis económica y, muy especialmente, contra el desempleo. También le piden más transparencia y rigor.
Vox ya le ha mostrado públicamente su apoyo en sesión parlamentaria, pero tras la reunión con el PSOE el portavoz de Vox, Alejandro Hernández, aseguró que cuanto "más cerca" esté la Junta del PSOE-A y Adelante Andalucía, "más difícil" será llegar a un acuerdo global con Vox.