LA AIReF es hoy más pesimista que hace cinco meses sobre la recuperación económica. El organismo que preside Cristina Herrero ha recortado su previsión de crecimiento para este año hasta el 6,6% en su Informe de los Presupuestos Iniciales de las Administraciones Públicas de 2021. Se trata de un recorte importante, de 1,6 puntos, dado que en noviembre había estimado un crecimiento del 8,2% del PIB.
La evolución de la pandemia en estos meses ha sido peor de lo esperado a finales del pasado año, ya que el ritmo de vacunación no está siendo el esperado y todavía no se pueden descartar nuevas olas de Covid-19 que obliguen a reforzar las restricciones, según ha explicado la directora de la división de Análisis Económico del organismo, Esther Gordo.
Este retraso en superar la crisis sanitaria está teniendo su reflejo en la economía. El cuarto trimestre cerró en negativo para España y el primer trimestre tampoco ha sido positivo en términos de actividad. Además, los indicadores que manejan los economistas del ente avanzan que la recuperación en Semana Santa se ha ralentizado.
A todo esto se suma un llamativo recorte de 1,1 puntos en la aportación al PIB de los fondos europeos en 2021. La institución no quiere cuestionar de momento la capacidad de absorber estas ayudas porque considera que el deber del Gobierno es conseguir ejecutar los fondos y mantiene el efecto multiplicador que tendrán en la economía, pero ha retrasado buena parte del efecto que tendrán en la recuperación hasta el año 2022.
Y eso que de momento, no ha incorporado en ese recorte del impacto de los fondos la incertidumbre que supone la parálisis del plan por imprevistos como la sentencia de la Justicia alemana. Fuentes del organismo explican que se espera que al final se aprueben las ayudas, por encajar bien en los tratados de funcionamiento de la UE, aunque reconocen que podrían sufrir retrasos.
Déficit y consolidación
En materia de déficit público, AIReF ha mejorado en tres décimas el dato que había previsto anteriormente, debido a que el cierre del año 2020 fue mejor de lo esperado a pesar de la aportación de Sareb al desequilibrio de las cuentas públicas.
En concreto, estima que el déficit será del 7,6% del PIB, con la deuda pública en el 118,7% del PIB. Un escenario que convierte a España en un país más vulnerable de lo que ya era, por lo que AIReF ha vuelto a reclamar al Gobierno el Plan de Reequilibrio que exige la Ley de Estabilidad Presupuestaria que la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, no contempla en este momento.
Entre los elementos que ayudarán a reducir el déficit este año destaca la mejora de la situación económica frente a 2020, la retirada progresiva de las medidas para combatir la pandemia o la ausencia de elementos no recurrentes como la reclasificación de la Sareb.
Además, las modificaciones que se incluyeron en el proyecto de Presupuestos ayudarán a reducir el déficit en 3,3 puntos del PIB en 2021, según ha explicado el director de la división de Análisis Presupuestario de AIReF, Ignacio Fernández- Huertas.
La recaudación en 2021 crecerá un 5,8%, según sus previsiones, hasta situarse en el 40,4% del PIB. Mientras, los gastos, se situarán en el 48% del PIB sin incluir el gasto para el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Entre las partidas de las cuentas públicas analizadas, destaca el menor coste de lo esperado que tendrá en las cuentas públicas el Ingreso Mínimo Vital (IMV) o la menor recaudación que el Gobierno conseguirá con medidas como la lucha contra el fraude, por el retraso que lleva en este terreno. También incorpora la recaudación que no se conseguirá por el retraso de nuevas medidas de fiscalidad ambiental.
También destaca el impacto en el déficit de medidas como la subida de los sueldos de los funcionarios y la revalorización de las pensiones.
En este último punto, AIReF recuerda al Gobierno que debe afrontar el reto del envejecimiento de la población y reconoce que todavía no ha visto el contenido de las reformas que ha enviado a Bruselas -entre las que figura una reforma del sistema de pensiones-.
Con todo esto, AIReF reclama al Ejecutivo "una estrategia fiscal a medio plazo creíble y realista" y además, pide más información sobre la actividad de las Administraciones Públicas para poder vigilar su gasto en este momento en el que están suspendidas las reglas fiscales.
"La institución detecta riesgos y retos elevados para la sostenibilidad a medio y largo plazo de las cuentas públicas y señala la posibilidad de que la crisis tenga efectos permanentes sobre el tejido productivo", advierte.