Todo parece indicar que los vaticinios se van a cumplir, como indicaba que el Gobierno revisara las previsiones económicas hace unas semanas. Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el PIB retrocedió un 0,5% en el primer trimestre del año, volviendo así a valores negativos después de haber registrado en el tercer y último trimestre de 2020 tasas del 17,1% y del 0,0%, respectivamente.
En cualquier caso, el propio INE alerta de que esten dato es un avance, una predicción. Se ha elaborado con datos hasta febrero y falta marzo, mes en el que la economía española mejoró, según los analistas.
Y lo hizo precisamente porque se levantaron parte de las restricciones. De hecho, el informe del Instituto indica que la caída de la economía se ha debido precisamente al efecot de la tercera ola, que se reflejó en los datos con un descenso del consumo y de la inversión.
En tasa interanual, el PIB descendió en el primer trimestre a un ritmo mucho menor de lo que lo hizo en el cuarto trimestre de 2020. En concreto, la economía española se contrajo un 4,3% interanual, frente a la caída del 8,9% experimentada en el trimestre anterior.
Con esta contracción interanual del 4,3%, la menor desde el primer trimestre de 2020, se acumulan ya cinco trimestres consecutivos de tasas interanuales negativas.
La demanda nacional restó 2,6 puntos al PIB interanual, cifra 3,6 puntos superior a la del cuarto trimestre de 2020, mientras que la demanda externa tuvo una aportación negativa de 1,6 puntos, 1,1 puntos más que en el trimestre anterior.
A precios corrientes, el PIB descendió un 3,3% en tasa interanual, tasa 4,9 puntos inferior a la registrada en el cuarto trimestre del año pasado.
Por otro lado, el INE alerta de que las incertidumbras que genera la pandemia "hace prever que las futuras revisiones de los resultados hoy publicados puedan ser de una magnitud mayor que la habitual".