El Índice de Precios de Consumo (IPC) subió un 1,2% en abril en relación al mes anterior y situó su tasa interanual en el 2,2%, nueve décimas por encima de la de marzo (1,3%), según los datos publicados este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), que confirman los avanzados a finales del mes pasado.
Con este repunte, con el que el IPC anual encadena su cuarta tasa positiva consecutiva, la inflación escala a niveles desconocidos desde hace más de dos años. De hecho, no se alcanzaba una tasa de IPC tan elevada desde octubre de 2018, cuando se situó en el 2,3%.
Al fuerte incremento de los precios en abril ha contribuido, principalmente, el encarecimiento de la electricidad y el mantenimiento de los precios de los carburantes, en contraste con las bajadas de abril de 2020. En cambio, se abarataron las frutas y los paquetes turísticos.
En concreto, el grupo de vivienda elevó casi seis puntos su tasa interanual en abril, hasta el 10%, por la subida del precio de la electricidad, mientras que el grupo de transporte incrementó más de 3,5 puntos su tasa, hasta el 7,4%, por la estabilidad de los precios de los carburantes para el transporte personal, frente al descenso que experimentaron en abril de 2020, en pleno confinamiento domiciliario.
En sentido contrario, el grupo de alimentos recortó su tasa interanual más de un punto, hasta el 0,3%, por el abaratamiento de las frutas y por la menor subida de los precios de las legumbres y hortalizas y del pescado y el marisco respecto a abril de 2020.
Descensos en el ocio
Entre los descensos también se encuentran el grupo de ocio y cultura, que redujo un punto su tasa interanual, hasta el -1,2%, por el menor coste de los paquetes turísticos, así como los hoteles, cafés y restaurantes, que recortaron cinco décimas su tasa interanual, hasta el -0,5%, debido a que los precios en los servicios de alojamiento subieron este año menos de lo que lo hicieron en abril de 2020.
Por su parte, la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) situó su tasa interanual en abril en el 0,0%, tres décimas menos que en marzo y tasa más de 2 puntos inferior al índice general.
Se trata de la mayor brecha entre la subyacente y la tasa general desde agosto de 1986.
En el cuarto mes de 2021, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) aumentó su tasa interanual ocho décimas, hasta el 2%, mientras que subió un 1,1% en tasa mensual.
Luz y alimentos
En tasa mensual (abril sobre marzo), el IPC se disparó un 1,2%, su mayor repunte mensual en nueve años, en concreto desde abril de 2012, impulsado por el encarecimiento de la luz, de los alimentos y del vestido y el calzado por la nueva temporada primavera-verano.
Lo que más se abarató en abril respecto al mes de marzo fueron las frutas (-4,8%) y los paquetes turísticos nacionales (-3,9%).
En cambio, lo que más subió de precio en relación al mes anterior fueron las prendas de vestir para niños (+16,9%), la ropa de mujer (+13,1%) y la electricidad (+12,6%).
En el último año (abril de 2021 sobre abril de 2020), lo que más ha subido de precio han sido la electricidad (+36,9%); los combustibles líquidos (+31,4%); otros aceites (+21,9%); la gasolina (+20,2%), y el gasóleo (+16,5%).
Por el contrario, lo que más se ha abaratado desde abril de 2020 son los hoteles y hostales (-25,6%); los vuelos internacionales (-13,3%); los paquetes turísticos internacionales (-13,1%), la telefonía móvil (-9%), y los ordenadores personales (-8,5%).
Tasas positivas
La tasa anual del IPC subió en abril en todas las comunidades autónomas. El mayor repunte de la tasa anual, de 1,2 puntos, lo experimentó Castilla-La Mancha, mientras que el menor, de siete décimas, se dio en Cataluña.
De este modo, en abril todas las comunidades presentaban tasas interanuales positivas.
Las tasas más elevadas de abril corresponden a Castilla-La Mancha (2,8%) y Navarra y Galicia, ambas con un 2,7%. La ciudad autónoma de Melilla, por su parte, disparó sus precios un 3% respecto a abril de 2020.
Por contra, las comunidades con los repuntes interanuales de precios más moderados son Canarias, con una tasa del 1,2%; Madrid, con un 1,7%, y Cataluña (2%).