El BCE avisa de riesgos económicos por las "burbujas" en vivienda, deuda y criptomonedas
El vicepresidente Luis de Guindos avisa de que el alza de la energía y los problemas de suministro plantean nuevos problemas para la recuperación.
17 noviembre, 2021 15:56Noticias relacionadas
- Crece la inquietud por la inflación en el Eurogrupo mientras el BCE insiste en retrasar el fin de los estímulos
- El Eurogrupo admite que la subida de precios es "más persistente de lo previsto"
- La banca mejora su eficiencia gracias al cierre de oficinas aunque sigue lejos de alcanzar la rentabilidad
- Lagarde (BCE) ve prematuro retirar estímulos y subir tipos pese al descontrol de la inflación
El Banco Central Europeo (BCE) ha avisado este miércoles de nuevos riesgos económicos para la recuperación en la eurozona tras la Covid-19 por la formación de "burbujas" en los mercados inmobiliarios de algunos Estados miembros. A la institución dirigida por Christine Lagarde le preocupa además la "exuberancia" en los mercados financieros y en las inversiones en criptomonedas, así como el alto nivel de deuda pública y privada tras la pandemia.
"Hay una serie de vulnerabilidades que se han intensificado", apunta el vicepresidente del BCE, Luis de Guindos, en el informe semestral de estabilidad financiera publicado este miércoles. "Los mercados de renta variable y activos de riesgo han mantenido su notable dinamismo, lo que los hace más susceptibles a las correcciones".
"Hay ejemplos de agentes del mercado que exploran inversiones más novedosas y exóticas. Paralelamente, los mercados de la vivienda de la zona del euro se han expandido rápidamente, con pocos indicios de que las normas crediticias se estén endureciendo como respuesta", alerta el vicepresidente.
Por lo que se refiere al mercado inmobiliario, el BCE destaca que los precios de la vivienda crecieron un 7,3% en la eurozona en el segundo trimestre de 2021, el ritmo más rápido en 16 años. Los Estados miembros con precios más sobrevalorados en comparación con los niveles previos a la pandemia son Luxemburgo, Austria, Alemania, Holanda y Bélgica. España queda de momento fuera de la zona de riesgo, con una subida inferior al 4%.
"Los riesgos de correcciones de precios a medio plazo se han incrementado significativamente en medio de estimaciones crecientes de sobrevaloración de los precios de la vivienda", prosigue el informe, que habla de "preocupaciones por una burbuja inmobiliaria impulsada por la deuda". "En particular, los hogares con hipotecas a tipo variable están expuestos a un aumento inesperado de los tipos de interés, lo que podría afectar negativamente a su capacidad para pagar su deuda", indica el BCE.
Exuberancia en los mercados
El instituto emisor denuncia que "los signos de exuberancia son cada vez más visibles en algunos segmentos del mercado financiero a medida que caen los rendimientos reales y continúa la búsqueda de rendimiento". La evolución alcista de los precios de los activos financieros "genera preocupaciones sobre la sobrevaloración en algunos mercados, lo que aumenta la probabilidad de que se produzcan correcciones".
El BCE enumera los múltiples factores que podrían desencadenar una corrección repentina a la baja de los mercados. Entre ellos, una recuperación económica más débil de lo esperado, el contagio de problemas en los países emergentes, tensiones de deuda en el sector empresaral o un ajuste abrupto en las expectativas del mercado sobre la retirada de estímulos monetarios y subida de tipos de interés.
"Más allá de los mercados nucleares, algunos segmentos de mercado más exóticos, como los mercados de criptoactivos, también siguen sujetos a episodios especulativos de volatilidad, y la creciente popularidad de las criptomonedas estables aumenta las interconexiones entre los criptoactivos y los mercados financieros convencionales", señala el estudio.
Finalmente, el BCE resalta que la deuda pública se ha disparado al 100% de media en la eurozona debido a las ayudas públicas desplegadas para amortiguar el impacto de la Covid-19. Un incremento que dispara los riesgos en particular para los países más endeudados (como España, que está en el 120%), al "aumentar la vulnerabilidad de la economía a un deterioro de las condiciones financieras y afectar negativamente a su resistencia a futuros shocks económicos".
"El aumento de la carga de la deuda resultante de la pandemia podría representar un lastre duradero para la economía", sostiene el informe. Ahora mismo, los Gobiernos se benefician de los bajos tipos de interés, pero "no se espera que el aumento del endeudamiento soberano se revierta durante al menos otra década, y un retorno a condiciones financieras menos favorables podría implicar una dinámica de deuda menos benigna", concluye el BCE.