Feijóo se apoya en la AIReF y el BdE contra las "hipotecas generales del Estado": el gasto es fijo, los ingresos inciertos
Los entes evaluadores alertan de que el gasto público estructural sigue creciendo.
19 octubre, 2022 02:59El proyecto de Presupuestos Generales del Estado de 2023 ha sido el principal protagonista de la actualidad política y económica de esta semana. Entes evaluadores como el Banco de España y la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) han dado a conocer sus impresiones sobre las futuras Cuentas. Y las primeras calificaciones no son positivas: ambos órganos critican el incremento del gasto público estructural sin tener fijados unos ingresos extra con los que sustentarlo.
Estas críticas han sido aprovechadas por Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular, en el enfrentamiento que protagonizó con Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, este martes en el Senado. El gallego acusó al socialista de presentar unos "presupuestos ficticios" en las Cortes y los tildó de "Hipotecas Generales del Estado".
¿Por qué utilizó el líder del PP esta expresión? Precisamente, por las críticas de AIReF y Banco de España. Ambas entidades han alertado de que gran parte del incremento del gasto público durante los últimos años ha llegado para quedarse... sin una recaudación fija que lo acompañe.
Por un lado, la Autoridad ha alertado de que el mayor techo de gasto que este año acompaña a los Presupuestos "implica una disminución significativa del gasto extraordinario temporal a favor del aumento del gasto estructural".
Todo ello sin un incremento de los ingresos estructurales asociado, pese al aumento de la recaudación que se está registrando. ¿Por qué? La propia Cristina Herrero, presidenta de la AIReF, avisó este martes de que un fenómeno temporal como la inflación es la causante del 50% del aumento de la recaudación en 2022. Y será la que genere el 75% del incremento los ingresos tributarios en 2023.
Es decir, que todavía no hay certezas sobre la parte de estos ingresos que puede ser fija o puede haber aflorado de la economía sumergida en los últimos años.
Pablo Hernández de Cos, gobernador del Banco de España, también abordó este lunes en el Congreso la insostenibilidad del gasto público estructural futuro, en este caso por la subida de las pensiones.
Cada incremento de estas prestaciones es estructural y el de este año, al haberlas vinculado al IPC, es especialmente relevante (del 8,5% como mínimo).
En este sentido, Hernández de Cos se mostró a favor de la postura de varios think tanks que en las últimas semanas han considerado que sería más acertado acotar las subidas de las pensiones a las rentas más bajas.
También alertó de que revalorizar siempre las pensiones con el IPC deja un incremento estructural del gasto que habrá que compensar en el futuro con otros ajustes."Se debería evitar el uso generalizado de cláusulas de indexación automáticas, en un contexto, además, en el que el margen fiscal se encuentra muy constreñido por el abultado endeudamiento público", alertó el gobernador. Cabe recordar, en este sentido, que la deuda pública está en cifras récord.
Núñez Feijóo también cargó contra las Cuentas de Sánchez por su carácter "ficticio" y afirmó que su Ejecutivo ha errado en todas sus previsiones. De hecho, le preguntó si el hecho de que haya "fallado siempre" en esas previsiones es "insolvencia o mala fe".
Lo cierto es que la acusación de la falta de credibilidad de las Cuentas de 2023 también está respaldada por los entes económicos. Tanto el Banco de España como la AIReF han rebajado sus previsiones económicas de España a crecimientos del 1,4% y del 1,5%, respectivamente. Muy por debajo del 2,1% del Gobierno.
Pero la Autoridad ha ido más allá. Solo unas horas antes, en la Comisión de Presupuestos del Congreso, Cristina Herrero, su presidenta, cargó duramente contra las Cuentas del Gobierno. Sobre ellas, advirtió de que iban cargadas de "carencias", "deficiencias" e "inconsistencias".
Por ello, consideró que no eran "realistas". ¿La causa principal? Que las previsiones de ingresos y gastos no estaban actualizadas, a diferencia del Plan Presupuestario que se envió a la Comisión Europea este sábado.
De hecho, en él, el Gobierno eleva la recaudación de este 2022 en más de 9.000 millones de euros y en 2023 en casi 11.000 millones. En total, unos 20.000 millones de euros de los que no hay ni rastro en los Presupuestos y con los que el Gobierno financiará las medidas anticrisis que se tendrán que prorrogar el próximo año.
De hecho, Jesús Gascón, secretario de Estado de Hacienda, trató de justificar esta acción en la misma Comisión. Argumentó que el techo de gasto que sujeta los Presupuestos se aprobó en la última semana de julio. Por entonces, la información era "muy limitada" y "muy parcial".
El exdirector de la Agencia Tributaria sostuvo que si hace tres meses se hubiera presentado un techo de gasto mayor (supera los 198.000 millones de euros, un 1,1% más que el de las Cuentas hoy en vigor) habría sido tildado de "auténtica temeridad".
Afirmó que no fue hasta octubre cuando comprobaron que aquella previsión de ingresos "se queda corta".
En este sentido, afirmó que lo enviado a Bruselas no supone "un Presupuesto alternativo". Solo se emplea para trasladar a la Comisión que existe margen fiscal para adoptar medidas anticrisis sin desviarse de la senda de reducción de déficit (previsto en el 3,9% del PIB en 2023).
Con todo, Gascón admitió que "nunca ha habido un plan presupuestario con una revisión tan grande", aunque justificó que "tampoco ha habido unas circunstancias como estas".
Con todo, esta revisión no ha gustado entre los grupos del Congreso, cuyos diputados han dejado claro su malestar este lunes y este martes. Ante esto, Núñez Feijóo consideró en el Senado que los Presupuestos del Ejecutivo nacen con "pies de barro".
"Hagamos unos Presupuestos como dicen la AIReF o el Banco de España porque son las cuentas de su Gobierno y no las cuentas de España", esperó el presidente del PP al jefe del Ejecutivo.
Pese a estas acusaciones, Sánchez no parece que vaya a enmendar o corregir en forma alguna sus Cuentas. Es más: le tiró un dardo a los populares, afirmando que los gobiernos de Mariano Rajoy, con sus propias previsiones macroeconómicas, "no dieron una" en su momento.