Lo último es que se aprobará de manera que afecte a las grandes fortunas ya en 2022. Es decir, con cargo a este mismo año, de manera que los contribuyentes afectados lo tengan que abonar en 2023. Sin embargo, los plazos acechan. Para que esto sea posible, el tributo tiene que estar aprobado antes del 31 de diciembre. 

Por ello, el plan del Ministerio de Hacienda es incorporarlo dentro de un proyecto de ley ya en marcha. Concretamente, en el que incluye las tasas a las grandes energéticas y a la banca. 

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Este proyecto legislativo ya está en el Congreso. Concretamente, en la fase de enmiendas a la totalidad. Se espera que la supere sin incidencias y que en noviembre se abra la fase de enmiendas parciales. 

El Gobierno indica que el nuevo tributo, que funciona como un recargo del Impuesto del Patrimonio, afectará potencialmente a unos 23.000 contribuyentes con patrimonios por encima de los tres millones de euros. Pero realmente solo impactará a unos 11.000 que residen en autonomías que tienen Patrimonio bonificado, que corresponden con regiones del Partido Popular.

Los tramos por el nuevo impuesto son los siguientes: del 1,7% para los patrimonios entre tres y cinco millones de euros, del 2,1% para los patrimonios entre cinco y diez millones y del 3,5% para aquellos superiores a los diez millones.

Son muy similares a los que ya tiene el impuesto que las autonomías pueden bonificar, el de Patrimonio. Se trata de los mismos porcentajes, aunque para cuantías ligeramente diferentes: de 2,6 a 5,3 millones de euros; de 5,3 a 10,6 millones, y de 10,6 millones en adelante.

El objetivo del nuevo tributo es obligar a los contribuyentes de las regiones del PP a pagar en su totalidad el impuesto de Patrimonio, que es como a día de hoy se fiscalizan las grandes fortunas en España. 

¿Cómo? Los contribuyentes que residan en regiones con bonificaciones del impuesto tendrán que pagar las cantidades que las haciendas autonómicas les estén perdonando. Una cantidad que en los casos de Madrid y Andalucía es del 100%. En el de Galicia es del 50%.

En cambio, aquellas regiones en las que las grandes fortunas pagan el 100% de Patrimonio no tendrán que abonar ninguna cantidad por el tributo estatal. Es decir, que el impuesto de solidaridad actúa como un recargo.

De esta manera, según Hacienda, se evita una posible doble imposición. En cualquier caso, todo dependerá de la letra pequeña de la futura enmienda 

Ingresos

El Gobierno aspira con esta medida a ingresar 1.503 millones de euros 'extra' en 2023 (con cargo a 2022) y en 2024 (con cargo a 2023), con una cláusula para considerar una posible ampliación de su aplicación. 

A diferencia de los impuestos a la banca y a las grandes energéticas (mediante los que se esperan unos 7.000 millones de euros en ingresos en sus dos años de vigencia), la recaudación por el nuevo Impuesto de Solidaridad no se ha incluido en la previsión de ingresos públicos para 2023 incluida en el proyecto de Presupuestos Generales del Estado del próximo año. 

¿La causa? Según indican desde Hacienda, que el tributo se va a emplear de manera "instrumental", de manera que sus ingresos solo se usarán para financiar las medidas que se prorroguen o se aprueben para paliar el impacto de la inflación y la guerra de Ucrania sobre la economía y las familias españolas. 

Esta sería la razón que impide que estos ingresos se incluyan dentro de la recaudación prevista en el proyecto presupuestario.

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Pese a ello, el Gobierno asegura que este tributo es una de las causas de que los ingresos tributarios vayan a aumentar en más de 10.000 millones de euros en 2023 en el Plan Presupuestario enviado a Bruselas. 

Podría no ser la única medida tributaria que el Ministerio de Hacienda coloque a través de las enmiendas al proyecto de ley de los impuestos a la banca y a las energéticas.

Según indican desde el departamento que dirige María Jesús Montero, la limitación del 50% en la posibilidad de la compensación de pérdidas de las filiales en los grupos consolidados en el Impuesto de Sociedades también podría entrar por esta vía. 

Cabe recordar que, con esta medida, es Gobierno espera obtener unos ingresos de 244 millones de euros en 2023 y 2.195 millones en 2024. ¿Habrá letra pequeña? Habrá que estar atentos a las próximas semanas.