Bruselas

Bruselas da un aviso al Gobierno de Pedro Sánchez por no rebajar el déficit público a un ritmo suficientemente rápido, pese a que podría hacerlo gracias al fuerte aumento de los ingresos tributarios tras la pandemia. Un desfase presupuestario continuado que España no puede permitirse por encontrarse en situación de riesgo debido a su elevado endeudamiento.

De hecho, nuestro país será en 2023 el tercero de la UE con una deuda pública más alta (112,5% del PIB), sólo por detrás de Grecia e Italia, según las previsiones económicas de otoño publicadas este viernes por la Comisión Europea.

En este sentido, el Ejecutivo comunitario avisa de nuevo al Gobierno de Sánchez del negativo impacto presupuestario de su contrarreforma de las pensiones en el actual entorno de descontrol de precios.

[Bruselas recorta a la mitad el crecimiento de España en 2023 hasta el 1% pero descarta por la mínima la recesión]

"La revinculación de las pensiones a la inflación pesará considerablemente en los Presupuestos de 2023, con un coste estimado del 1,4% del PIB", señala el informe. El IPC de España se situará en el 8,5% de media este año y bajará al 4,8% en 2023 y al 2,3% en 2,3%, según los cálculos de Bruselas.

El ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, tendrá que compensar el coste de la indexación con nuevos ajustes en la segunda parte de la reforma de las pensiones, que se ha comprometido a enviar a Bruselas antes de fin de año. De ello depende el quinto pago por valor de 10.000 millones de fondos Next Generation, cuyo desembolso está previsto para junio de 2023.

Déficit público previsto para los países de la UE en 2023

El comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, se ha mostrado convencido de que llegará a una solución de compromiso con Escrivá. "Confío en que, en el periodo venidero, continuaremos nuestro diálogo (los servicios de la Comisión y las autoridades españolas) para garantizar que este aspecto presupuestario de la reforma de las pensiones se acuerde de forma satisfactoria", ha respondido a una pregunta de EL ESPAÑOL-Invertia.

En todo caso, el informe de la Comisión destaca en varios pasajes que "pese a los sólidos resultados en recaudación, el déficit de las administraciones públicas se mantendrá por encima del 3% durante todo el horizonte de las previsiones". De hecho, Bruselas prevé que el desfase presupuestario apenas baje del 4,6% en 2022 al 4,3% en 2023, con una reducción mayor hasta el 3,6% en 2024. Ese año se aplicará de nuevo el Pacto de Estabilidad, que aunque se relaje mantendrá el límite del 3% de déficit.

"Los ingresos tributarios mantienen un fuerte dinamismo, pero la reducción del déficit se desacelerará", censura Bruselas. El informe cifra en un 1,6% del PIB el coste de las medidas de ayuda adoptadas por el Gobierno en 2022 para mitigar el impacto de la crisis energética.

Algunas de ellas, como la rebaja del IVA de la electricidad y el gas, o la reducción del impuesto especial sobre la energía, han mermado los ingresos del Gobierno. Otras, como la ayuda de 20 céntimos por litro de carburante, el bono social a la calefacción o los subsidios a los hogares de bajos ingresos y a los sectores económicos más afectados por la crisis, aumentan el gasto

Nivel de deuda pública prevista en los países de la UE en 2023

Eso significa que el déficit se reducirá este año (respecto al 6,9% registrado en 2021) gracias únicamente al fuerte crecimiento de los ingresos. Todos los principales impuestos registran cifras de crecimiento de doble dígito, debido a la resistencia del mercado laboral, los sólidos beneficios empresariales y la elevada inflación, destaca Bruselas.

En 2023, el crecimiento de la recaudación se modera por el frenazo del crecimiento. Aún así, el nivel de ingresos será alrededor de 4 puntos porcentuales mayor que en 2019, aunque España no recuperará su nivel de PIB previo a la pandemia hasta el segundo trimestre de 2024.

A juicio del Ejecutivo comunitario, la evolución positiva de la recaudación tributaria en España se explica por algunos "factores estructurales". Entre ellos, "las políticas de apoyo a los ingresos, los cambios en los patrones de consumo que implican más pagos digitales y una posible disminución de la capacidad de recurrir a la elusión fiscal".

Al ralentizarse la reducción del déficit, la deuda pública disminuirá muy lentamente desde el 114% del 2022 al 112,1% en 2024, "impulsada por el PIB nominal".

La vicepresidenta primera, Nadia Calviño, interpreta que Bruselas "respalda las estimaciones fiscales del Gobierno, con una previsión de deuda pública a finales de 2023 idéntica a la de los Presupuestos y una senda de reducción de déficit que permitirá estar por debajo del 3% del PIB en 2025", según explican fuentes del ministerio de Economía.

Lo cierto es que el Ejecutivo comunitario recorta a la mitad (1%) la previsión de crecimiento que ha incluido el Gobierno de Sánchez en los Presupuestos de 2023 (2,1%). El motivo es que la Comisión es más pesimista que Calviño sobre la fortaleza del consumo privado y de las inversiones el año que viene. 

Previsión de crecimiento para los países de la UE en 2023

En todo caso, Gentiloni considera que la evolución de la economía española será "bastante positiva" en los próximos años. "En la difícil situación en la que nos encontramos, el nivel de crecimiento para España será del 1% el año que viene y del 2% en 2024, lo que es la cifra más alta entre los principales Estados miembros de la eurozona", ha dicho.

"El año que viene sólo Irlanda, Malta y Rumania crecerán más que España", destaca también el ministerio de Economía. Calviño presume además de que Bruselas prevé "una bajada intensa de la inflación en los próximos años", así como un "buen comportamiento del mercado laboral en España, con una tasa de desempleo por debajo del 13%". Aún así, nuestro país seguirá siendo líder en paro de la UE, duplicando la media de la eurozona (7,2%).