La facturación del sector privado crece, sí, pero cada vez lo hace menos. De hecho, en solo un mes, las ventas de las empresas han pasado de un crecimiento interanual de casi el 15% a uno del 5%. Es decir, que han perdido 10 puntos de crecimiento. 

Así lo reflejan los datos de ventas diarias de las empresas de la Agencia Tributaria. Según esta fuente, las ventas pasaron de una tasa interanual de crecimiento del 14,8% durante las semanas que van del 12 de octubre al 8 de noviembre a una evolución del 5% en los días que van del 9 de noviembre al 6 de diciembre. 

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La desaceleración se produce en la mayoría de los sectores, incluso en algunos que deberían tener una mejor evolución por determinadas onomásticas comerciales, como el propio BlackFriday o las compras prenavideñas. 

De hecho, el sector del comercio al por menor pasa de una mejora de las ventas del 10,7% a una desaceleración del 8,7%. Este fenómeno también se observa en la hostelería. Con todo, en este caso, la mejora interanual sigue siendo muy marcada con un incremento de la facturación que pasa del 10,7% al 8,1%. 

Con todo, según el informe de la Agencia Tributaria, el ámbito que peor lo está pasando es el de la industria manufacturera. Pasa de una evolución del 16,1% anual a que su facturación crezca prácticamente la mitad: un 7,8%. 

Con todo, el cambio más radical es en la energía. Pasa de un crecimiento del 36% a un dato negativo del -11,6%. Sin embargo, en este caso hay varios matices. Entre ellos, que el precio de la luz se ha derrumbado y ha pasado a ser el más bajo desde mayo del año pasado. 

Consumo

El problema pasa, también, por que las subidas de precios están causando un descenso del consumo de los hogares. Al fin y al cambio, la inflación está multiplicando las escasas subidas de sueldo de los trabajadores. 

Esto provoca que la población afronte la Navidad y las semanas previas con peores perspectivas que el año pasado. Así lo indica un informe de Intrum, que apunta que el 52% de los españoles se encuentra en una situación financiera peor que hace un año. 

Con todo, esta cifra está por debajo de la media europea. En el viejo continente, el 59% de la población considera que su situación financiera es peor este 2022 que en 2021.

Lo cierto es que la economía española no está tan abatida como la europea. A diferencia del resto de sus vecinos, España está esquivando la recesión, algo que debería seguir ocurriendo en 2023, a diferencia de gran parte de la UE.

De hecho, esta misma semana, Nadia Calviño, vicepresidenta y ministra de Asuntos Económicos, afirmó que "casi con toda seguridad creceremos más" del 4,4%, que es la previsión que recoge el cuadro macroeconómico del Gobierno.