La inflación de la eurozona baja al 6,9% en marzo pero la subyacente sigue escalando
El mal dato de inflación subyacente da munición a los halcones del BCE que quieren seguir subiendo los tipos pese a las turbulencias en el sector bancario.
31 marzo, 2023 11:00La inflación de la eurozona experimentó una fuerte caída en marzo debido al abaratamiento de la energía, pero la subyacente sigue sin dar respiro y marca un nuevo récord histórico. El índice de precios de consumo armonizado (IPC) se redujo por quinto mes consecutivo en marzo hasta situarse en el 6,9%, frente al 8,5% registrado en febrero, según la estimación inicial publicada este viernes por Eurostat, la oficina estadística comunitaria.
Pese a esta caída, el nivel de precios de la eurozona todavía sigue muy lejos del objetivo del 2% del Banco Central Europeo (BCE). Además, la inflación subyacente (que excluye los precios más volátiles de la energía y de los alimentos frescos) sigue al alza, desde el 5,6% en febrero al 5,7% en marzo. Este es el indicador al que la institución dirigida por Christine Lagarde da más importancia a la hora de decidir sobre los tipos de interés.
Si se analizan los principales componentes del IPC de la eurozona, los alimentos son el factor que más ha subido en el último año (con una inflación anual del 15,4% en marzo, frente al 15% en febrero). En segundo lugar, están los productos industriales no energéticos (6,6% frente al 6,8% en febrero), seguidos de los servicios (5% frente al 4,8% en febrero).
En contraste, el precio de la energía ya baja un 0,9% en comparación con los niveles registrados en marzo de 2022, cuando estalló la guerra en Ucrania.
Tras la fuerte caída del IPC en marzo, España (3,1%) se convierte en el segundo país de la eurozona con una inflación más baja, por detrás de Luxemburgo (3%). En el extremo contrario de la clasificación, los Estados miembros con precios más descontrolados son Letonia (17,3%), Estonia (15,6%) y Lituania (15,2%).
En Alemania, la inflación cayó desde el 9,3% registrado en febrero al 7,8% en marzo. El principal factor detrás de esta moderación del IPC es la fuerte desaceleración de los precios de la energía desde el 19,1% interanual en febrero al 3,5% en marzo. Sin embargo, los precios de los alimentos siguieron escalando hasta un 22,3% interanual, según los datos de la oficina estadística Destatis.
Por lo que se refiere a Francia, la inflación se moderó hasta el 6,6% en marzo tras el aumento del 7,3% registrado en febrero. Una ralentización que se explica también por el desplome de los precios de la energía, mientras que los alimentos y el tabaco siguen subiendo, de acuerdo con el informe preliminar de Insee. Entre los grandes países de la eurozona, Italia es el que tiene una inflación más alta, aunque también se reduce desde el 9,8% en febrero al 8,2% en marzo.
Euro area #inflation at 6.9% in March 2023, down from 8.5% in February. Components: food, alcohol & tobacco +15.4%, other goods +6.6%, services +5.0%, energy -0.9% - flash estimate https://t.co/JanK9NcMzB pic.twitter.com/WzYZfXCEeM
— EU_Eurostat (@EU_Eurostat) March 31, 2023
El mal dato de inflación subyacente da munición a los halcones del Banco Central Europeo (BCE) que quieren seguir subiendo los tipos de interés pese a las turbulencias en el sector bancario. La representante alemana en el directorio, Isabel Schnabel, ha dicho esta semana que la inflación subyacente de la eurozona está resultando ser persistente y que la caída del precio de la energía tardará en trasladarse al resto de precios.
Por su parte, Christine Lagarde ya dejó claro que la crisis bancaria no va a obligar al BCE a poner fin a las subidas de tipos de interés, como mucho podrían ralentizarlas. La presidenta sostiene que dispone de instrumentos diferentes para garantizar a la vez la estabilidad de precios y la estabilidad financiera. La próxima reunión del Consejo de Gobierno del BCE se celebrará el 4 de mayo.