El nombre de Luis de Guindos, actual vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), ha sonado en las últimas semanas en muchas ocasiones como futuro ministro de un hipotético gobierno liderado por Alberto Núñez Feijóo, candidato del Partido Popular para las elecciones generales del 23 de julio, si bien el banquero central se ha descartado para el puesto.

"Me quedan algo menos de tres años en el BCE y espero cumplir mi mandato", ha clarificado De Guindos durante su intervención en el curso de verano que organizan la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE) y BBVA en la UIMP de Santander.

En efecto, De Guindos accedió al puesto de vicepresidente del BCE en marzo de 2018, dejando atrás su cargo como ministro de Economía, Industria y Competitividad del Gobierno español. El mandato del BCE dura ocho años.

La inflación, "el mal absoluto"

En otro orden de cosas, el banquero central ha explicado que "la inflación es el mal absoluto", por lo que ha defendido la lucha del BCE contra el crecimiento exacerbado de los precios a través de la subida de los tipos de interés.

"Si hay algo que de algún modo está afectando a la calidad de vida de los europeos ha sido tener inflaciones muy elevadas", ha apuntado De Guindos en respuesta a las palabras de Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno, que en este mismo foro ha calificado de "insensata" la política monetaria del BCE.

En opinión del exministro, la elevada inflación ha generado pérdidas de poder adquisitivo "que han llevado a una moderación del consumo". "Ahí está nuestra aportación al futuro, que es ir reduciendo este nivel de inflación. La política monetaria tiene que cumplir su papel", ha añadido.