Bruselas

La vicepresidenta primera y ministra de Economía, Nadia Calviño, ha defendido este lunes el "fuerte compromiso con la disciplina fiscal" del Gobierno de Pedro Sánchez, que según ha dicho permitirá reducir en 5.000 millones de euros la emisión de deuda pública neta en 2023 y cumplir las recomendaciones de la UE en materia fiscal tanto este año como en 2024.

Calviño ha admitido que la negociación sobre la reforma de las reglas de disciplina fiscal es "compleja" porque hay "multitud de puntos de vista" entre los Estados miembros. Unas dificultades que han impedido a la presidencia española cerrar un acuerdo en octubre, tal y como tenía previsto.

Por ello, la vicepresidenta primera aplaza a noviembre el inicio de "la fase final de la negociación política sobre la base de un texto legislativo". Pese a este retraso, su objetivo sigue siendo aprobar la reforma antes de fin de año, de forma que el nuevo Pacto de Estabilidad pueda empezar a aplicarse en 2024.

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"La buena marcha de la economía española y el cumplimiento holgado de nuestros objetivos fiscales me permiten anunciar hoy que vamos a reducir en 5.000 millones de euros la emisión de deuda prevista para 2023. Con ello pasaremos de una emisión de deuda neta de 70.000 millones a 65.000 millones de euros, lo cual nos pone en una posición de resiliencia y de fuerza en este contexto de tipos de interés al alza", ha dicho Calviño a su llegada a la reunión del Eurogrupo que se celebra en Luxemburgo.

La vicepresidenta primera ha resaltado que el coste medio de la deuda española solo ha subido "en el entorno de los 40 puntos básicos", cuando los tipos de interés han aumentado en 450 puntos básicos, lo que permite que las necesidades de refinanciación se reduzcan al 13% al año. Por su parte, el periodo medio de amortización se mantiene en ocho años.

"Todo ello refleja la fuerte confianza de los inversores y de los mercados internacionales en la buena marcha de la economía española y en el cumplimiento de los objetivos fiscales", sostiene Calviño. En este sentido, ha destacado que la deuda pública se reducirá por debajo del 110% ya este año, mientras que el déficit público se situará en el 3% en 2024.

La vicepresidenta ha presumido del plan presupuestario remitido este lunes a la Comisión Europea, que a su juicio "refleja la buena marcha de la economía", con un crecimiento del 2,4% este año y del 2% en 2024. Calviño asegura que España será en los próximos años "uno de los principales motores de crecimiento de Europa", aunque reconoce como "riesgos" las tensiones y conflictos geopolíticos, así como las subidas de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE).

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En cuanto a su candidatura para presidir el Banco Europeo de Inversiones, Calviño también admite que no habrá novedades en las reuniones de octubre del Eurogrupo y del Ecofin en Luxemburgo. La vicepresidenta se ha limitado a señalar que su candidatura es "fuerte" y cuenta con "fuertes apoyos", sin desvelar ninguno de ellos.

Por su parte, el ministro de Finanzas de Bélgica, Vincent Van Peteghem, que dirige la elección del nuevo presidente del BEI, ha confirmado que ninguno de los cinco candidatos se ha retirado y que continúa las consultas con las capitales para encontrar un candidato que reúna el apoyo de al menos 18 países y al menos el 68% del capital del BEI.

Van Peteghem ha pedido a los grandes países de la eurozona (en referencia sin citarlos a Francia y Alemania) que adopten una "posición clara" sobre su aspirante preferido con el fin de desbloquear el proceso. Su objetivo es lograr una decisión "más pronto que tarde", aunque no ha querido fijar ninguna fecha.