El ministro Carlos Cuerpo conversa con el comisario Paolo Gentiloni durante el Eurogrupo de este lunes en Luxemburgo

El ministro Carlos Cuerpo conversa con el comisario Paolo Gentiloni durante el Eurogrupo de este lunes en Luxemburgo Unión Europea

Macroeconomía

Sánchez renuncia a enviar a Bruselas el presupuesto de 2025 para el 15 de octubre como exige la ley europea

Gentiloni replica a Cuerpo que la Comisión está dispuesta a dar margen con los plazos pero que "hay un límite a la flexibilidad".

7 octubre, 2024 15:25
Bruselas

Ante el bloqueo de las negociaciones con sus socios parlamentarios (en particular con el JxCat de Carles Puigdemont), el Gobierno de Pedro Sánchez renuncia a enviar a Bruselas su plan presupuestario de 2025 en la fecha que exigen las reglas fiscales europeas: el 15 de octubre. El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha confirmado en Luxemburgo que no podrá entregar en plazo a la Comisión Europea ningún borrador de las cuentas públicas para el año que viene porque no ha hecho los deberes a tiempo. Eso sí, Cuerpo todavía no se resigna a un escenario de prórroga presupuestaria y no descarta poder tener presupuestos en las próximas semanas o meses.

La gran paradoja es que, aunque no tiene ninguna garantía de que dispondrá de presupuesto para 2024, Sánchez sí que tiene previsto mandar al Ejecutivo comunitario un plan de ajuste plurianual para los próximos cuatro años, otra de las obligaciones que establece el nuevo Pacto de Estabilidad. Este plan prevé un objetivo de déficit del 3% para este año, del 2,5% para 2024, del 2,2% para 2025 y del 1,8% para 2026, según ha detallado Cuerpo.

"Hasta que no tengamos el borrador de Presupuestos sobre la mesa, no presentaremos el plan presupuestario", ha explicado Cuerpo a su llegada a la reunión del Eurogrupo que se celebra este lunes en Luxemburgo. El ministro de Economía no ha querido fijarse ningún nuevo plazo, aunque ha apuntado a finales de noviembre como fecha límite. "Tenemos todavía tiempo. La Comisión Europea tiene hasta finales de noviembre para hacer una evaluación de los planes fiscales estructurales a medio plazo y ese es el entorno en el que nos estamos moviendo", ha relatado.

[Sánchez no tramitará por falta de mayoría las leyes sobre jornada laboral, vivienda o impuesto a banca y eléctricas]

En el pasado, Bruselas exigía a los países que no contaran con borrador de presupuestos para el 15 de octubre (por motivos electorales u otros) que le remitieran un plan con escenario de prórroga presupuestaria. Sin embargo, la Comisión ha pedido este año que no le manden nada por la gran cantidad de documentos que tiene que examinar, ya que se solapan los planes presupuestarios con los de ajuste a medio plazo, según Cuerpo.

"En un entorno normal donde para el 15 de octubre no tenemos ese borrador de presupuestos generales del Estado, habríamos presentado un plan presupuestario sin medidas de política económica. Y eso no va a suceder porque la Comisión Europea ha pedido que se presenten planes con medidas de política económica", ha relatado el ministro de Economía. "La presentación del plan presupuestario va asociada de manera directa a los avances que podamos hacer en materia de presentación de los presupuestos generales del Estado", ha insistido.

El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, conversa con la presidenta del BCE, Christine Lagarde, durante el Eurogrupo de este lunes en Luxemburgo

El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, conversa con la presidenta del BCE, Christine Lagarde, durante el Eurogrupo de este lunes en Luxemburgo Unión Europea

En cuanto al plan de ajuste a medio plazo, Cuerpo ha explicado que en estos momentos el Gobierno está ya cerrando "las últimas conversaciones con la Comisión Europea" y por eso sí podrá llegar a tiempo el 15 de octubre. En todo caso, también aquí ha habido retraso: el plazo original que había fijado el Ejecutivo comunitario era el 20 de septiembre, aunque sólo dos Estados miembros (Dinamarca y Malta) cumplieron este requisito. En una de sus primeras intervenciones desde su nombramiento, el nuevo gobernador del Banco de España, José Luis Escrivá, ha pedido al Gobierno de Sánchez más transparencia en la elaboración de este plan estructural.

La legislación de la UE obliga a todos los Estados miembros a enviar anualmente a Bruselas, a más tardar el 15 de octubre, un proyecto de plan presupuestario para el año siguiente. A continuación, el Ejecutivo comunitario realiza una evaluación en profundidad del borrador con el fin de determinar si se ajusta o no al Pacto de Estabilidad. Bruselas puede pedir ajustes adicionales o bien tumbar el plan si lo considera incompatible con las reglas fiscales, algo que sólo ha sucedido una vez con Italia. Hasta ahora, la Comisión nunca ha sancionado a ningún país por incumplir el plazo de entrega.

Pese al retraso, Cuerpo ha asegurado que "nosotros presentaremos los presupuestos como nos corresponde", pero ha eludido precisar ninguna fecha concreta.

Por su parte, el comisario de Asuntos Económicos, Paolo Gentiloni, ha asegurado que está dispuesto a ser flexible con los plazos, pero también ha subrayado que el margen de maniobra es limitado. "La Comisión siempre ha sido flexible, pero hay un límite a la flexibilidad. No podemos perder la conexión entre el plan presupuestario y los planes estructurales a medio plazo. Las dos cosas deben estar conectados, lo que significa que el nivel de flexibilidad sobre los plazos está ahí, pero es limitado", ha dicho en rueda de prensa al final del Eurogrupo.

Minicoaliciones de voluntarios

Durante el Eurogrupo de este lunes, Cuerpo ha presentado una propuesta española cuyo objetivo es acelerar la toma de decisiones en la UE en todos los ámbitos que tengan que ver con la mejora de la competitividad económica, y en particular en la puesta en marcha de la unión de mercados de capital. El ministro de Economía plantea la creación de minicoaliciones de voluntarios (de a partir de 3 países, con ayuda de la Comisión), que funcionarían como laboratorio de pruebas para este tipo de iniciativas. El proyecto piloto que plantea España para empezar es la creación de estándares comunes de rating para pymes a nivel europeo.

El ministro de Economía defiende que se trata de un "mecanismo innovador para tomar decisiones de integración y hacerlo de forma ágil y eficaz". La denominación oficial de este mecanismo es "laboratorio de competitividad" y con él se pretende que este tipo de iniciativas de integración estén operativas y tengan efectos "desde el primer momento". "La Comisión realizaría posteriormente una evaluación de estos proyectos y recomendaría si escalarlos o llevarlos a cabo por el conjunto de los 27 Estados miembros", ha relatado Cuerpo.