El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su rueda de prensa de este jueves en Bruselas

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante su rueda de prensa de este jueves en Bruselas Unión Europea

Macroeconomía

España solicita el quinto pago de 23.900 millones de fondos Next Generation sin haber completado la reforma fiscal

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El Gobierno de Pedro Sánchez solicita a Bruselas el quinto desembolso de fondos Next Generation sin haber completado la reforma fiscal, que es la principal condición que exige la UE a cambio de estas ayudas, lo que acarrea el riesgo de una congelación parcial de las subvenciones.

La Comisión de Ursula von der Leyen ha recibido este viernes esta quinta petición de pago de España por un importe de hasta 23.900 millones de euros, el mayor hasta ahora porque por primera vez incluye créditos blandos. En concreto, la solicitud suma hasta 8.000 millones de euros en subvenciones y dos desembolsos de préstamos por valor de 15.900.

El motivo de este pago ampliado es que el Gobierno de Sánchez asegura haber completado más de 50 hitos y objetivos correspondientes a los desembolsos sexto, séptimo y octavo, lo que a su juicio le permite adelantar la solicitud de los fondos.

En total, el ministerio de Economía sostiene que ha cumplido un total de 84 de las reformas e inversiones que exige la UE a cambio de las ayudas Next Generation. Al mismo tiempo, el titular del departamento, Carlos Cuerpo, ha pedido aplazar y reformular otras exigencias para facilitar su cumplimiento.

No obstante, la reforma más importante que Bruselas reclama a cambio de este quinto pago es la tributaria, que el Gobierno de Sánchez todavía no ha completado. El Congreso aprobó este jueves una reforma de mínimos que incluye el nuevo impuesto a la banca o el tipo mínimo global para las multinacionales, pero la alianza PP-PNV-Junts tumbó el impuesto a las grandes empresas energéticas.

También está pendiente la subida fiscal al diésel para equipararlo a la gasolina, una medida que rechaza Podemos. El propio Sánchez anunció este jueves al término del Consejo Europeo en Bruselas que el Gobierno tiene previsto aprobar por decreto ley antes de fin de año tanto el impuesto a las energéticas como la subida fiscal al diésel. No obstante, dio a entender que da por perdido el primero, pero todavía espera que se apruebe el gravamen al diésel.

En el último Eurogrupo de diciembre, Cuerpo dio a entender que el impuesto a las energéticas ya no forma parte de la reforma fiscal que pide Bruselas, pero no dijo nada del diésel. Según publica El País, el Ejecutivo comunitario ya ha comunicado al Gobierno que congelará parte de los fondos de este quinto pago si la subida de los impuestos al diésel no se aprueba en el Congreso.

La Comisión Europea dispone ahora de un plazo de dos meses -que puede prorrogarse- para decidir si acepta los cambios reclamados por España y verificar si efectivamente se han cumplido las reformas comprometidas. Después, el quinto pago tendrá que ser avalado también por los Gobiernos de los Veintisiete.

En paralelo, Cuerpo ha pedido una nueva adenda al plan de recuperación cuyo objetivo es redirigir un total de 1.500 millones de euros de fondos Next Generation al "relanzamiento" de la zona de Valencia afectada por la DANA. Este dinero se destinará a infraestructuras de transporte, hídricas, medioambientales y agrícolas, así como a "urbanismo y vivienda resiliente".

España es el segundo mayor beneficiario (sólo por detrás de Italia) de los fondos Next Generation, que la UE puso en marcha en 2020 para amortiguar el impacto de la pandemia de Covid-19. En total, nuestro país tiene adjudicados 163.000 millones de euros, 80.000 millones en subvenciones y 83.000 millones en créditos.

Hasta ahora, el Ejecutivo comunitario ha desembolsado 47.960 millones en subvenciones y sólo 340 millones en créditos. El plazo para ejecutar los fondos Next Generation concluye en 2026 y Bruselas ya ha lanzado varios avisos al Gobierno de Sánchez para que acelere si no quiere perder dinero.