Segur Ibérica, empresa propiedad de los fondos de capital riesgo españoles MCH y Corpfin, está negociando su integración con otro grupo de seguridad del sector, una operación valorada en, al menos, 200 millones de euros, cuatro veces más de lo que pagaron sus actuales propietarios en 2004 por hacerse con la empresa. "La empresa está a punto de cerrar una operación, pero todavía no está hecha", afirman fuentes próximas a la compañía.
Entre los potenciales candidatos a comprar o fusionarse con la empresa se encuentran Seguritas Direct, Prosegur y la compañía Seguriber-Umano, participada por la familia Oriol y Aznar, a su vez, uno de los principales inversores en el fondo Corpfin. Mónica de Oriol e Icaza, expresidenta del Círculo de Empresarios, fue relevada la semana pasada por Luis Carbonell como administradora única de la sociedad.
La empresa vive una crisis de clientes originada en su papel en la tragedia del Madrid-Arena hace cuatro años, en la que fallecieron cinco menores durante un concierto del DJ Steve Aoki.
“No hay ERE de 4.000 personas”
El cambio en la cúpula de Seguriber ha coincidido en tiempo y forma con el de Segur Ibérica, que estaba presidida desde 2011 por Luis Lada, expresidente de Telefónica, que ha sido sustituido en sus funciones por el actual consejero delegado Ignacio Suárez esta misma semana. Entre sus consejeros se encuentra la exministra Ana Birulés y también fue presidida por el exministro de Defensa, Pedro Morenés, hasta su entrada en el gobierno en 2011.
A la espera de que se firme la operación esta misma semana, la plantilla de más de 7.000 personas observa con preocupación su futuro tras haber recibido la alerta de los sindicatos, encabezados por UGT, sobre un ajuste de empleo, si bien no será de extinción. “No hay ningún ERE sobre la totalidad de la plantilla como se ha publicado por ahí. Lo único que ocurre es que se ha comunicado a los comités de empresa que se va a realizar un ajuste de plantilla, pero será minoritario”, asegura un portavoz de la compañía a EL ESPAÑOL.