Si nada se tuerce de aquí a que acabe su ejercicio el próximo 31 de enero, Inditex volverá a cerrar un año récord, tanto en ventas como en beneficio. Alcanzará los 3.100 millones de euros de rentabilidad, según las estimaciones realizadas por la agencia estadounidense Bloomberg.
Y todo indica que lo conseguirá. La dueña de Zara presentó este miércoles sus cuentas de los nueve primeros meses del año, en los que desveló que su beneficio crece a un ritmo del 9% y sus ventas repuntan más rápido, un 11%.
Uno de los datos más significativos de Inditex es cómo ha empezado la recta final del año. El inicio de la Navidad y las ofertas del ‘black friday’ han disparado sus ingresos un 16% entre el 1 de noviembre y el 12 de diciembre. De seguir esta evolución, será la primera vez que supere los 3.000 millones de euros de beneficio anual.
Esa cifra es especialmente significativa si se analiza su evolución en los últimos años. Para la empresa gallega no ha habido crisis ni debacle del consumo. En 2007, antes del pinchazo económico, el beneficio neto de la matriz de Bershka y Pull & Bear rozaba los 1.100 millones de euros. En 2016 ha triplicado ese beneficio y casi también sus ventas porque, antes del desplome de la economía global, ingresaba 8.196 millones y, en este ejercicio superará los 23.200 millones, según las estimaciones de Bloomberg.
Tres motivos
¿Cómo ha logrado este crecimiento? Básicamente, por tres vías: aperturas de tiendas, margen sobre ventas y crecimiento online. En cuanto a los locales, en estos años ha pisado el acelerador. En 2007, la compañía fundada por Amancio Ortega tenía 3.691 tiendas entre todas sus cadenas. Hoy alcanza las 7.240.
En China su presencia era diminuta. Hace casi una década, sólo tenía 14 locales (12 ‘Zaras’ y dos Massimo Dutti). Nada que ver con lo que sucede ahora. A finales de octubre, tenía 607 tiendas en el gigante asiático, de las que 189 eran ‘Zaras’. Al cierre del año tendrá más porque ha acelerado sus aperturas. En el último trimestre ha abierto 150 locales.
Crece porque se extiende y, también, porque es más rentable. Su margen bruto (la diferencia entre ingresos y gastos) alcanza este año el 57,9% de sus ventas (9.492 millones de euros). Antes de la crisis, ese diferencial era del 56,7%, lo que equivalía a 5.349 millones, según detalla en sus informes financieros.
La tercera pata de ese crecimiento es el negocio online. Es cierto que la empresa con sede en Arteixo no da detalles de cómo va su tienda en internet. De hecho, no la diferencia. Su presidente, Pablo Isla, explica que se trata de un negocio integrado. Por ejemplo, hay clientes que compran online y devuelven alguno de esos productos en tienda y, una vez en el local, vuelven a comprar, según ha explicado Isla en intervenciones públicas. A 31 de octubre, Inditex vende online en 41 países. Con tiendas físicas está en el doble de mercados, en concreto, en 93.
La compañía no hace públicos los datos pero sí se sabe cuánto vende en la red. En el último ejercicio fiscal, ingresó online 1.157 millones de euros, según la información publicada por el periódico Expansión. Lo hizo a través de las dos sociedades con las que opera sus tiendas virtuales: Fashion Retail (que abarca 20 mercados europeos, entre ellos, España) e ITX Fashion, que agrupa las ventas en Estados Unidos, Canadá y Japón.
Valor en bolsa
La evolución de la compañía ha tenido su reflejo en bolsa. En estos casi diez años, su capitalización ha pasado de los 27.000 millones de euros a más de 100.000. Es la compañía cotizada en España con mayor valor en el parqué madrileño. La segunda, el Banco Santander, ‘se queda’ en los 70.000 millones de euros, según su cotización al cierre de este miércoles.
¿Y qué pasa con sus competidoras? El segundo grupo textil, la sueca H&M, también ha crecido, pero a menor ritmo. En bolsa, la compañía nórdica ha pasado de valer 35.300 en 2007 a los 46.500 millones de euros actuales. La rentabilidad de su negocio también ha despegado, pero está significativamente lejos de la empresa gallega. Ha pasado del equivalente a 1.474 millones de euros en 2007 (factura en coronas suecas) a los 1.893 millones de euros al cierre del ejercicio 2016, que concluyó el pasado el 31 de noviembre. La empresa nórdica aún no ha desvelado cómo le ha ido este año.