Iberdrola engorda su autocartera para blindar el pago del dividendo
Un colchón de 151 millones de títulos, valorados en 900 millones, para no alterar el beneficio por acción.
6 enero, 2017 02:34Noticias relacionadas
Como viene siendo habitual en los meses previos al pago de dividendo por parte de Iberdrola, la eléctrica presidida por Ignacio Sánchez Galán se ha cuidado muy mucho de activar los mecanismos para que la retribución no varíe el beneficio por acción, con un aumento desmedido de los títulos en circulación.
Lo hace llevando a cabo un aumento notable de acciones propias, con compras cuyo importe viene a coincidir, prácticamente, con el importe bruto de la retribución.
En esta ocasión, la eléctrica se ha comprometido a abonar un bruto de 0,135 euros por título a los accionistas que venden a la empresa sus derechos de asignación gratuita. Un precio que, en el hipotético caso de todos los accionistas lo asumieran, supondría un coste de unos 860 millones de euros.
Cantidad ligeramente inferior a los aproximadamente 900 millones de euros en los que estarían valorados por los más de 151 millones de acciones (el 2,4% de su capital), que la eléctrica ha amasado, casi en su totalidad, en los últimos cinco meses. Un colchón que, como ocurriera el pasado año, volverá a ser amortizado en el momento que lo decida la junta de accionistas.
Autocartera, en el mismo sitio
La cantidad coincide prácticamente con las acciones que la junta del pasado 8 de abril autorizó amortizar. Entonces fueron algo más de 157 millones de acciones propias las transmitidas, equivalentes al 2,46% de su capital para evitar la dilución derivada de su programa de dividendo flexible y mantener estable el beneficio por acción de la compañía.
En aquel momento, Iberdrola dejó su autocartera, con apenas 4 millones de acciones (solo el 0,066% del capital), para seguidamente comenzar un nuevo programa de recompra de acciones.
Muy timorato inicialmente, al comprar tan solo 14 millones de acciones entre mayo y julio de 2016, hasta el 0,222% del capital, y mucho más agresivo entre agosto y diciembre.
Cinco meses en los que la eléctrica acabó adquiriendo más de 133 millones de acciones por las que, a un precio medio de 5,7 euros, acabó desembolsado unos 760 millones de euros. En conjunto, más de 151 millones de acciones propias están valoradas en unos 900 millones.
La novedad del 19% de retención
Los accionistas de Iberdrola van a ser los primeros en comprobar los efectos de la nueva normativa fiscal, en relación a la venta de los derechos de suscripción en el mercado secundario. Desde el pasado 1 de enero, esa transmisión se considera ganancia patrimonial, sujeta a una retención del 19%.
Si opta por no vender lo derechos ni acudir a la ampliación, el accionista recibirá el importe en efectivo, que permanece con la consideración de rendimiento de capital mobiliario.
La tercera implicación del dividendo flexible (scrip dividend) comporta acudir a la ampliación y obtener títulos totalmente liberados. El dividendo en especie que no constituye renta a efectos del IRPF ni tampoco está sometido a retención.
Desde este viernes, y hasta el próximo 16 de enero, están abiertos los plazos para negociar los derechos de asignación gratuita (una acción nueva por 45 derechos) o solicitar el cobro en efectivo, vendiendo los derechos a la compañía al precio bruto fijado de 0,135 euros.