El dueño de marcas como Johnnie Walker, Smirnoff o Guinness, explicó que el nombre del proyecto rinde homenaje a George Roe, un fabricante irlandés de whisky del siglo XIX cuya destilería, George Roe&Co, se convirtió en la más grande de Irlanda.
La nueva marca, que supone el retorno de Diageo al mercado del whisky irlandés tras la venta de Bushmills a José Cuervo en noviembre de 2014, estará disponible en las principales ciudades europeas a partir de marzo.
Diageo, además, ha informado de que reconstruirá la antigua 'Guinnes Power House' de Dublín para establecer allí la destilería de 'St James Gate', que comenzará a producir en la primera mitad de 2019.
Al respecto, el ministro de Agricultura, Alimentación y Marina de Irlanda, Michael Creed, destacó que el whisky es la bebida espirituosa que "crece más rápido", con unas ventas globales que se incrementaron "más un 300% y unas exportaciones superiores a 400 millones de euros en los últimos diez años".
"La inversión de 25 millones de euros en este proyecto durante tres años fomentará la economía local, creará empleos y enriquecerá la oferta turística de la ciudad", añadió.