Orange cerró al año 2016 con una aceleración de sus ingresos en España. La filial de la compañía gala incrementó un 6% su volumen de negocio hasta superar la barrera de los 5.000 millones de euros, impulsados por los servicios móviles. En el lado de la rentabilidad, hizo crecer un 13% el resultado bruto de explotación (Ebitda), gracias principalmente a las sinergias tras la incorporación de Jazztel.
En concreto, Orange España cerró el año con 5.014 millones de euros. De estos, 2.630 millones procedían de servicios móviles, que crecieron un 7,7% (el mayor incremento de todas las 'divisiones). La venta de servicios fijos permitió ingresar 1.872 millones, un 5% más que un año antes.
Analizando las cifras de ventas por trimestres, la compañía ha ido acelerando desde el 1,8% del incremento entre enero y marzo hasta el 7,9% logrado en los últimos tres meses del ejercicio.
En cuanto a rentabilidad, el Ebitda ajustado creció un 26,4% hasta los 1.350 millones de euros. En términos comparables, la subida fue del 13,4%. Es la subida más importante de todas las que han tenido lugar en el grupo. Las sinergias por la integración de Jazztel "compensan parcialmente el aumento de los costos comerciales y de las compras de contenidos".
Durante el ejercicio, la compañía invirtió 1.086 millones de euros lo que representa un 21,7% sobre sus ingresos, destinados, fundamentalmente, al desarrollo de las nuevas redes de alta velocidad y de fibra óptica. Representa una caída ligera de en torno al 1% respecto al año anterior.