Así es el mercado 'b' de licencias VTC para Uber y Cabify: hasta 60.000 euros
Los precios se disparan por la demanda de estos permisos, en pleno ‘boom’ de las nuevas plataformas.
30 marzo, 2017 01:59Una burbuja en potencia. El sector de las licencias de vehículos con chófer, utilizadas por empresas tecnológicas como Uber o Cabify, está en plena ebullición. Las plataformas crecen y también el interés por entrar en el mercado. El resultado: una creciente inflación de precios de las licencias.
Hoy hay empresas y titulares individuales que piden hasta 60.000 euros por una de estas tarjetas, muy por encima del precio que se reclamaba hace tan sólo unos meses. En el sector se espera que el aluvión de permisos que se atisba en los dos próximos años rebaje la temperatura.
“Se está repitiendo el modelo de burbuja del taxi”, asegura una fuente relevante del sector de VTC en España, que prefiere mantenerse en el anonimato. La escasez de permisos, pese al incremento importante tras el ‘agujero’ de la ley, y el creciente interés de profesionales y empresas por este mercado han sido los principales ingredientes. El ejemplo de Cabify sirve para ilustrarlo: desde noviembre de 2015 hasta ahora la compañía ha multiplicado por 3,5 el número de conductores que trabajan en su plataforma sólo en Madrid.
El efecto está siendo muy similar a lo que ha sucedido en los últimos años en el taxi, donde el número de licencias se han mantenido invariables y cada una de ellas se ha llegado a cotizar por encima de los 200.000 euros en grandes capitales como Madrid, tal y como aseguró la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).
Hasta 60.000 euros
Se trata de un mercado que, al igual que sucede con el taxi, es opaco. Como en este, se permite la transmisión de las autorizaciones, según se establece en el artículo 20 de la ley de ordenación de transportes. Sin embargo, tiene varias peculiaridades respecto al taxi: las licencias están vinculadas a un coche y no al conductor, y hay una obligación de que cada sociedad (o autónomo) tenga un mínimo de siete licencias. Esta limitación, que fue ‘tumbada’ por el Tribunal Supremo en 2012, fue rescatada por el Gobierno en la actualización de la ley en noviembre de 2015.
En distintos tablones de anuncios como Milanuncios y otros, hay ofertas que van desde los 40.000 a los 60.000 euros por una licencia. Pese a estar a años luz de los precios que se pagan (y se pagaron en el pasado) por un permiso para el taxi, se trata de cifras muy altas y que han crecido a gran velocidad en los últimos meses. “La gente no puede entrar en el mercado como quisiera y es lógico que, por oferta y demanda, se incremente el precio”, asegura otra fuente que lleva años trabajando en el mercado de las VTC.
“Se vende licencia VTC de Madrid con coche BMW serie 3 con 1 año y 15.000 kilómetros; precio razonable; contrato de trabajo con proveedor de servicios y participación en sociedad”, asegura una de las ofertas. Precio: 79.500 euros. Hay casos en los que se piden por cada uno de los permisos, en paquetes de hasta cinco, casi 100.000 euros.
Lo habitual suele ser una transmisión normal de las tarjetas, aunque hay otras modalidades que se están poniendo sobre la mesa y que no están permitidas por ley. Hay propietarios de vehículos que llevan asociados una licencia VTC que están alquilando este coche, cediendo la explotación de su negocio durante un periodo determinado, algo que es ilegal, según las fuentes jurídicas consultadas por este medio.
¿Cómo se ofrecen?
Hay titulares particulares de licencias que han logrado una (o varias) licencia de VTC a través de sentencia judicial, tras el agujero creado por la ley ‘ómnibus’. Esos pueden transmitir la tarjeta a otros profesionales que, al menos, tengan una licencia, según confirman las mismas fuentes jurídicas. A estos se les suele ofrecer, incluso, la posibilidad de entrar en una sociedad con más licencias que cuenta con “mejores condiciones” con operadores como Uber o Cabify. Aseguran facturaciones mensuales en sus ofrecimientos que, en algunos casos, superan los 6.000 euros.
La otra realidad es la de las empresas. En este caso hay varias modalidades para dar acceso a esas licencias. Una de ellas: a través de una cuenta de participación. Es decir, es una forma de sociedad en la que quien llega paga un dinero inicial, que en muchos casos ronda los 60.000 euros según varios anuncios publicados, a cambio de poder explotar las licencias, repartiéndose ambas partes la facturación. Es una forma de ofrecer la licencia con una financiación que, según esas fuentes jurídicas, “es muy arriesgado sobre todo si en el futuro el valor de esa licencia se reduce por la tendencia del mercado”.
En este particular crecimiento, también hay otros sectores que quieren sacar tajada. Uno de los casos es el de los abogados. Hay despachos que ofrecen en estas webs la posibilidad de obtener licencias o de gestionar todos los permisos, a cambio de unos ingresos.
Un aluvión que puede ‘aflojar’
En este contexto, todas las fuentes consultadas aseguran que el aluvión de licencias que se espera para los dos próximos años puede ralentizar el incremento de los precios o, incluso, reducirlos. En concreto, se espera que de las 5.300 licencias que hay otorgadas en toda España, se sumen, como mínimo, otras 5.000 más.
La razón: el agujero creado por la ley ómibus. El mecanismo era sencillo. Un particular o empresa pedían una o varias licencias de este tipo. Normalmente, las comunidades autónomas las rechazaban. El primer recurso llegaba al tribunal superior de cada territorio, que reiteraban el ‘no’. El siguiente y último paso se daba en el Supremo, donde la gran mayoría de las resoluciones judiciales eran favorables a la concesión.
Las cifras del taxi
¿Cuál es la fotografía del sector del taxi? Los últimos datos oficiales son los aportados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) en junio del año pasado. Un pequeño grupo de ayuntamientos de grandes ciudades mostró a Competencia el valor medio de una licencia en el mercado secundario. Entre los ejemplos que señala destaca San Sebastián, con 220.000 euros; Santander, con 215.000 euros; Palma de Mallorca, con 205.000… Madrid es la ciudad con mayor número de taxis operando y el precio que se pagó fue de 142.000 euros.
Uno de los factores decisivos en esta actividad es la escasez. Desde hace años en muchas de estas ciudades no se ofrecen nuevas licencias. La CNMC lo recuerda: según el INE, el número se ha mantenido prácticamente estable entre 1998 (70.373) y 2015 (70.509).