Las autoridades europeas exigen a los bancos que puedan rescatarse a sí mismos y por eso atesoran este colchón de capital y emiten deuda subordinada capaz de absorber pérdidas.
Al igual que han hecho otras entidades como Bankia o CaixaBank, la deuda subordinada a 10 años tendrá la opción de amortización anticipada por Bankinter en el quinto año, ha informado la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Está previsto que los valores se admitan a cotización en la bolsa de Irlanda y cuenten con una calificación crediticia de "bono basura" tanto por Moody's como por Standard and Poor's.
Para la colocación, el banco que dirige María Dolores Dancausa ha contado además de con la ayuda de su propio equipo, con la colaboración de Barclays, BBVA, Crédit Agricole, Natixis y el Santader.