En aquella ocasión, en el año 2012, el veterano banquero renovó con el visto bueno del 74,76 % del capital del Banco Santander y tras su fallecimiento en septiembre de 2014, Ana Botín accedió al cargo con la aprobación del consejo de administración de la entidad.

Sin embargo, desde entonces no había renovado su cargo de consejera y, por lo tanto, no había sido reelegida como presidenta, algo que ha conseguido con cifras récord en la historia de la entidad, según han explicado a Efe fuentes del banco.

Si se compara con el resto de grandes entidades españolas, Ana Botín se coloca en el podio de los que cuentan con mayores apoyos, por detrás del presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, reelegido recientemente con un respaldo del 99,5 % y del primer ejecutivo de Banco Sabadell, Josep Oliú, que obtuvo un apoyo del 97,84 % de los accionistas en 2015.

En el caso del número uno de BBVA, Francisco González, el banquero fue reelegido en 2016 con un apoyo del 96 %, según datos recopilados por Efe.

Por otro lado, el Santander se convirtió hoy en el primer banco que certifica la sostenibilidad de su junta de accionistas, un reconocimiento de AENOR que acredita que todos los procesos del encuentro, desde su planificación hasta después de su celebración, han seguido criterios que "permiten reducir su impacto y generar beneficios económicos, sociales y ambientales en la comunidad".