Así lo ha anunciado hoy el Banco Popular en un hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en la que ha añadido que el nombramiento de Sánchez-Asiaín surtirá efectos el 18 de abril de 2017.
Pedro Larena presentó el pasado lunes, 3 de abril, su dimisión por "razones personales", una decisión "muy difícil" de tomar, pero que es "lo más honesto" en la nueva etapa que comienza el banco, tal y como ha dicho hoy el hasta ahora número dos, ante la junta general de accionistas.
Tras la citada junta, que ha aprobado todas las propuestas de acuerdo planteadas, el banco ha celebrado un consejo de administración en que Sánchez-Asiaín Sanz, además de haber sido nombrado consejero delegado, también ha sido designado vocal del consejo.
Asimismo, se ha nombrado a Vitalino Nafría Aznar consejero independiente para cubrir la vacante producida por la salida de Roberto Higuera.
Igualmente, Nafría ha sido designado vocal de la Comisión de Auditoría y de la Comisión de Riesgos y Cumplimiento.
También se ha aprobado el nombramiento de Antonio González-Adalid García-Zozaya como vicepresidente primero del consejo, y de Miguel Escrig Meliá como director financiero del banco.
El nuevo consejero del Banco Popular, Ignacio Sánchez-Asiaín, licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Comercial de Deusto (Bilbao), es un ejecutivo con una larga trayectoria en el mundo financiero.
Ha desempeñado el cargo de Senior Advisor Iberia en Oliver Wyman&Co. desde enero de 2016 hasta la actualidad, en tanto que con anterioridad fue director general corporativo de Responsabilidad del Negocio y Unidades de Apoyo del Grupo Kutxabank.
También ha sido miembro del European Senior Advisory Board en Oliver Wyman&Co y ha ocupado puestos de dirección en el BBVA.
De la misma manera, ha estado presente en diferentes consejos de empresas y entidades financieras como el de Abanca.