La tabla de revalorizaciones del Mercado Continuo tiene un claro líder desde que empezó el año: Adolfo Domínguez. La firma de moda aguanta ganancias de más del 50% desde enero a pesar de la reciente corrección sufrida en las primeras semanas de abril. Los analistas le siguen viendo potencial de remontada.
Después de haber acumulado la pérdida de más de la mitad de su valor en Bolsa entre los años 2013 y 2016, Adolfo Domínguez se ha colocado en el disparadero de muchas carteras de inversión al calor del drástico plan de ajuste diseñado por la textil orensana. El último impulso a este camino de recuperación en el parqué lo ha recibido al anunciar el cierre de sus oficinas de administración en Madrid con el objetivo de concentrar estas actividades en suelo gallego con el consiguiente ahorro en personal y otros costes corrientes.
Las unidades `repatriadas¿ han sido las de comercio electrónico y la línea U, que se habían asentado a Madrid en los años 2012 y 2015, respectivamente. En la primera de ellas tiene la compañía una de sus apuestas más firmes para la recuperación de negocio, puesto que este canal supone unos costes relativos menos abultados y en el contexto de cierre de establecimientos físicos, fundamentalmente en Europa, con menor margen de beneficio.
El inicio de este cambio de rumbo en su gráfica de cotización se sitúa en torno a la presentación de las últimas cuentas trimestrales de la cotizada. A mediados del pasado enero, la textil dio cuenta de un sonoro recorte en pérdidas del 27,2% frente al ejercicio anterior. En los nueve primeros meses de su ejercicio fiscal, hasta el pasado noviembre, la compañía había reducido números rojos hasta 12,31 millones de euros, lo que se tradujo entonces en avances de más del 15% en el Mercado Continuo que hoy sigue coronando en acumulado anual.
A pesar de este vertiginoso rally, la corrección ha llegado a la compañía, que desde que empezó abril cede un 9,5%, protagonizando uno de los peores arranques de mes y segundo trimestre en Bolsa española. No obstante, el consenso de analistas sigue viendo factible la recuperación de máximos no vistos desde el año 2014 en las proximidades de los 6,00 euros por acción, una cota que supone un potencial alcista del 21% desde los precios a los que mañana martes volverán a negociarse sus títulos tras el parón bursátil de Semana Santa y Pascua.