Los hechos tuvieron lugar durante la madrugada del pasado lunes, cuando un grupo de 50 personas, aproximadamente, atacaron con explosivos la sede de la compañía de seguridad española en la ciudad paraguaya, ubicada en una triple frontera con Brasil y Argentina.
Durante el ataque, los asaltantes incendiaron un total de 15 vehículos y mantuvieron un tiroteo con la policía antes de huir hacia Brasil, causando la muerte de uno de los agentes. No obstante, tres de los presuntos atacantes fueron abatidos tras una persecución en la localidad carioca de Foz de Iguazú.
En un comunicado, Prosegur Paraguay aseguró que el importe sustraído en el centro logístico de la compañía en Ciudad del Este "no supera los ocho millones de dólares (7,31 millones de euros). Asimismo, la compañía aseguró que el ataque no tiene ningún impacto sobre los servicios que presta en el país.
Según documentos internos de la policía paraguaya, los autores del atraco supuestamente pertenecen al denominado Primer Comando de la Capital (PCC), una de las principales organizaciones criminales de Brasil.