El pasado marzo Telefónica anunció que se haría con 178,6 millones de acciones de la operadora neerlandesa KPN en su filial Telefónica Deutschland, un 6% del capital, a cambio de 72 millones de acciones de su autocartera, lo que suponía un 1,43% del capital social del grupo español. Pues bien, la compañía de Países Bajos ha aprovechado el buen momento que vive la acción de la española para vender una parte de las acciones y tiene intención de reducir su participación aún más.

Cuando se puso en marcha la operación, que elevó el peso de la española en la alemana hasta el 69,2%, el valor de los títulos era de unos 740 millones de euros. KPN se había comprometido a que la venta, una vez realizase, se hiciese de forma ordenada.

"Las acciones que vendimos fueron muy bien absorbidas por el mercado, es una acción líquida", explicó a Bloomberg el director financiero de KPN, Jan Kees de Jager, quien explicó que se trata de una participación estrictamente financiera y que su objetivo es el de reducirla aún más. 

A principios de marzo las acciones de Telefónica superaron la barrera de los 10 euros por primera vez desde 2016 y se han mantenido por encima de ese umbral desde entonces.