Uber, ¿empresa de transporte o plataforma digital? La UE ordena la economía colaborativa
El abogado de la UE expondrá su dictamen el día 11 de mayo, con semanas de retraso.
30 abril, 2017 01:51Noticias relacionadas
La batalla de la regulación de la economía colaborativa se está librando en Europa. Y gran parte de los focos están colocados en una de las salas del Tribunal de la Unión Europea en Luxemburgo. El abogado general de la UE será el que se pronuncie sobre si Uber es una plataforma digital o una empresa de transporte. Y lo hará el próximo 11 de mayo.
Con ese pronunciamiento, el abogado general de la UE ‘ordenará’ buena parte de la economía colaborativa y las plataformas en áreas como el transporte o los alojamientos turísticos. Mientras tanto, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) sigue manteniendo silencio sobre su propuesta de regulación, en plena convulsión interna.
Fue el pasado 29 de noviembre cuando taxistas y Uber se vieron las caras en el Tribunal de Luxemburgo en una vista tras la que el abogado general se comprometió a publicar sus conclusiones preliminares sobre el caso el 6 de abril. Sin embargo, lo ha retrasado. Según reza en el calendario del Tribunal, será el próximo 11 de mayo cuando se produzca ese dictamen. Este es el paso previo al pronunciamiento definitivo del tribunal.
Primeros pasos, en 2015
El origen hay que encontrarlo en la demanda de interpuesta por Elite Taxi hace más de dos años por competencia desleal. El motivo del enfrentamiento era el servicio entre particulares de Uber (Pop), que lleva casi dos años suspendido cautelarmente por el juez de lo Mercantil número 2 de Madrid (hoy opera con su servicio con chóferes privados) Tras la vista en abril de 2015, el juez de Barcelona decidió pedir al Tribunal de Luxemburgo que determinara, según las normas de la UE, si Uber es una empresa de transporte o una plataforma digital.
Esa diferenciación es clara porque permitirá poner orden en este mercado. No sólo en España, sino en los estados miembro donde operan estas compañías. Muchos de estos países están a la espera de este primer pronunciamiento, después de que la Comisión Europea pusiera sobre la mesa unas recomendaciones que se basan, principalmente, en contar con una menor regulación.
La propia Comisión Europea aseguró ante el tribunal europeo el pasado mes de noviembre que los servicios de Uber en España “no sólo constituyen un servicio de la sociedad de la información”. Pese a ello, incidió en que su misión no es “tomar partido sino proporcionar asesoramiento jurídico al TJUE sobre cómo interpretar la legislación aplicable de la Unión”.
¿Y la CNMC?
Mientras continúa la cuenta atrás para este pronunciamiento, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) mantiene silencio sobre su propuesta de regulación de este sector. La falta de consenso en el consejo respecto a su propuesta de regulación y la situación de ‘impasse’ que vive el organismo, con hasta tres consejeros con su mandato caducado, han sido claves.
El llamado ‘informe Uber’ generó una división clara en el seno del organismo: los que apostaban por un planteamiento mucho más desregulador, liderados por el presidente, y los que eran más conservadores en las propuestas. En su primer estudio sacudía al sector del taxi y reclamaba el derribo del “monopolio” con una desregulación casi total, eliminando la restricción en la concesión de licencias de taxi y de VTC y las tarifas reguladas. En el segmento del turismo, planteaba medidas como la eliminación de la inscripción de las viviendas turísticas en un registro y de la moratoria en la autorización de nuevos inmuebles para este uso.
Se ha cumplido un año desde la presentación del primer documento y no ha habido una propuesta definitiva aprobada por el consejo. Según ha podido saber EL ESPAÑOL, no hay fecha fijada en el calendario para esa luz verde. ¿La razón? Esas mismas fuentes conocedoras, plantean los dos factores: la UE aún no se ha pronunciado sobre el ‘caso Uber’ y la situación interna de la CNMC.
Enfrentamiento con taxistas
Todos miran a Europa. Y en este contexto, la temperatura en el enfrentamiento entre los taxistas y empresas como Uber o Cabify ha subido. A la huelga del pasado mes de marzo tanto en Madrid como en Barcelona, donde llegaron a advertir de que el sector del taxi era “un polvorín que está a punto de estallar”, se suman las denuncias mutuas de agresiones y actos violentos de las semanas anteriores.
La última ha sido de la Unauto, la organización que engloba a todas las empresas del sector de VTC, que alzó la pasada semana para alertar de ataques con ácido, huevos llenos de pintura y piedras contra los vehículos.