El banco, que entre enero y marzo consolidó la "positiva evolución" del negocio bancario minorista, recortó un 59,1% interanual los saneamientos de crédito y adjudicados. En el primer trimestre, las provisiones realizadas por Liberbank fueron de 23 millones de euros, por lo que el beneficio antes de impuestos se situó en 37 millones de euros.
Según Liberbank, la intensificación del dinamismo comercial y de la actividad típica bancaria en el arranque del año se reflejó en el incremento de las formalizaciones de hipotecas y créditos al consumo, que crecieron un 89,4% y un 14%, respectivamente, propiciando que en marzo, por primera vez desde la crisis, el saldo vivo de los préstamos hipotecarios aumentara.
Los créditos dudosos de la entidad se redujeron en 1.830 millones de euros en el primer trimestre, lo que supone un descenso porcentual del 38,3% respecto al mismo periodo de 2016. De esta forma, la tasa de mora se situó en el 13%, frente al 19,4% de un año antes.