La plataforma de crowdfunding inmobiliario Housers ha recibido la autorización de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). De esta forma, se convierte en la primera compañía de este sector que logra la 'luz verde'. Para obtenerla, ha necesitado hacer "algunas pequeñas modificaciones" en su funcionamiento.
Creada por dos emprendedores, el madrileño, Álvaro Luna y el valenciano Tono Brusola, en este tiempo ha logrado casi 23 millones de euros de financiación colectiva para 92 inmuebles: 73 en Madrid, 9 en Barcelona, 7 en Valencia, 1 en Marbella y 2 en Palma de Mallorca.
Luna se limita a asegurar a EL ESPAÑOL que se han llevado a cabo "pequeñas modificaciones" de su funcionamiento. La principal preocupación del regulador tenía que ver con la neutralidad de la plataforma.
Hoy, Housers cuenta con casi 43.000 usuarios registrados. De ellos, el 65% deciden invertir en diferentes proyectos inmobiliarios. La compañía asegura que la rentabilidad neta media está alcanzando el 3,6%, sólo por el alquiler.
En el mes de febrero de este año cerró la mayor operación de crowdfunding inmobiliario logrado hasta el momento en España. 1.278 inversores individuales financiaron de forma compartida, en tan solo 57 días, la construcción de un edificio de obra nueva en Madrid. Una operación de 1,8 millones de euros, de los que 1,2 millones fueron aportados por los inversores.
La autorización ya está expedida por parte de la CNMV. Ahora sólo queda que el regulador formalice su registro. Hasta ahora, se ha inscrito a 19 plataformas de financiación colectiva.