OHL asegura que ha "reforzado las obligaciones y compromisos incluidos en su código ético y en su política anticorrupción, así como las medidas para impulsar y controlar su más estricto cumplimiento".
Así lo indica en la presentación que el presidente de la compañía, Juan Villar-Mir, realizará a la junta de accionistas, remitida a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La primera intervención de Villar-Mir ante los socios tras tomar el relevo en la Presidencia de su padre Juan Miguel Villar Mir en junio de 2016, coincide con la salida del consejo de la compañía del consejero externo Javier López Madrid, yerno del expresidente, tras resultar presuntamente implicado en la 'Operación Lezo'.
La mayoría del consejo de administración, liderada por los consejeros independientes, había presionado para conseguir la salida de López Madrid. Tiene la condición de investigado en este procedimiento porque Ignacio González le mencionó,en una de las conversaciones intervenidas, como conocedor del pago de una comisión de 1,4 millones de euros por la adjudicación a OHL del tren de Móstoles a Navalcarnero, un proyecto que resultó un fiasco.
Previsiones de la compañía
En su discurso a los socios, el actual presidente repasará las medidas que ha adoptado desde que asumió el cargo para recortar la deuda y reflotar el negocio del grupo, fundamentalmente en la construcción, para garantizar la viabilidad de la compañía.
Con estas medidas, OHL prevé recortar su deuda con recurso a la matriz a un importe inferior al Ebitda a cierre de este año, cuando también prevé elevar un 30% sus ventas y más que cuadruplicar el Ebitda, de forma que se sitúen en 5.022 millones de euros y 1.009 millones, respectivamente.
Mientras tanto, en 2018 espera alcanzar 1.239 millones de euros de resultado bruto de explotación, un 23% superior al de este año.