Este mismo miércoles, la Junta Única de Resolución (JUR) ha anunciado en un comunicado la transferencia de "todas las acciones e instrumentos de capital" de Banco Popular al Santander de forma que la entidad "operará bajo condiciones normales de negocio como un miembro solvente y líquido del Grupo Santander con efecto inmediato".
"La JUR y la autoridad nacional española de resolución (el FROB) han decidido que la venta va en el interés público dado que protege a todos los depositarios de Banco Popular y garantiza su estabilidad financiera", ha destacado la entidad presidida por la alemana Elke König.
En concreto, el proceso se inicia cuando el Banco Central Europeo (BCE), encargado de la supervisión de entidades bancarias, notifica a la Junta Única de Resolución que un banco está en quiebra o en peligro de quiebra. En el caso del Popular, el BCE notificó a la JUR esta situación la noche del miércoles.
"El deterioro significativo de la situación de liquidez del banco en los últimos días ha conducido a la determinación de que la entidad habría sido incapaz, en el futuro cercano, de pagar sus deudas y otras obligaciones", ha justificado en un comunicado la entidad presidida por Mario Draghi.
Tras esta conclusión del BCE, la autoridad europea de resolución ha tomado el control de Banco Popular y, en un "proceso competitivo" ejecutado junto con el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), ha seleccionado al Santander como entidad adjudicataria a cambio de un precio simbólico de un euro.
"UNA NOCHE LARGA"
Según ha explicado König en una rueda de prensa este miércoles, el debate y la decisión final se ha prolongado durante la noche y finalmente ha sido adoptada pasadas las 6.00 horas de la mañana. "Ha sido una noche larga", ha confesado la alemana, para después subrayar, no obstante, que se ha logrado el objetivo de cerrar la venta del Popular antes de que abriesen los mercados.
En ese periodo de tiempo la JUR tenía que dilucidar si era posible aplicar una solución privada y si la resolución era necesaria para el interés público. En caso contrario, la entidad hubiese sido liquidado conforme a la legislación nacional sobre casos de insolvencia.
De esta forma, König ha señalado que el problema de liquidez al que se enfrentaba Banco Popular y la ausencia de soluciones privadas y de acciones de supervisión que evitasen la quiebra hacían que la resolución de la entidad fuese "necesaria para el interés público". "Había definitivamente un interés público, pero considerando la falta de liquidez, había un periodo de tiempo muy corto", ha apuntado.
"Como resultado, tuvimos que conducir el proceso en un periodo muy estrecho de tiempo y al final elegimos Santander porque la oferta que hicieron fue la mejor para garantizar nuestros objetivos, que en particular eran garantizar la estabilidad financiera y asegurar que desde hoy las oficinas de los bancos pueden abrir con normalidad", ha añadido.
"De acuerdo con esta decisión, los depósitos están a salvo y la estabilidad financiera en España, como puede verse en la reacción del mercado, está realmente asegurada", ha destacado la alemana, para después recordar que la operación no afecta a los contribuyentes por no existir una inyección de dinero público ni se ha tenido que recurrir al Fondo Único de Resolución (FUR).
Una vez la JUR ha adoptado un sistema de resolución, la Comisión Europea debe aprobar el esquema o plantear objeciones. El Ejecutivo comunitario ha dado luz verde a la resolución de Banco Popular a primera hora de este miércoles.