Mediaset España (Telecinco, Cuatro, FDF, Boing, Divinity y BeMad) ha comenzado su plan de recompra de acciones adquiriendo 1,1 millones de títulos durante el último mes. En términos económicos, se han invertido 13,2 millones de euros, más del 10% de los cien millones que la compañía ha puesto como límite para este plan aprobado en la junta de accionistas celebrada en abril. Este plan coincide con el periodo que el regulador italiano ha dado a Vivendi para que decida su futuro en la matriz de Mediaset.

Oficialmente la empresa indica que este plan de recompra de acciones persigue reducir el capital social de la sociedad. “El objetivo es remunerar a los accionistas de la sociedad de manera complementaria al dividendo ordinario que viene siendo distribuido cada año”, han indicado desde Mediaset a EL ESPAÑOL.

Este programa de recompra fue aprobado por la junta general ordinaria de accionistas celebrada el 23 de abril de 2016 y concretado un año después. La inversión máxima se fijó en cien millones de euros y no podrá exceder el 5% del capital social de la sociedad, equivalente a 16,8 millones de acciones. El programa permanecerá vigente hasta el 20 de febrero de 2018.

El programa comenzó a ejecutarse en 17 de mayo

Mediaset busca reducir el número de acciones en el mercado, con lo que directamente se incrementa el beneficio por acción de la empresa. Los analistas apuntan a que estas operaciones generalmente demuestran confianza en la compañía involucrada y que es una señal al mercado de que las cosas van bien.

El programa comenzó a ejecutarse el 17 de mayo con la compra de 60.000 acciones a un precio medio de 11,9 euros y con la intermediación de Société Générale. Posteriormente se ha seguido ejecutando en 18 jornadas bursátiles diferentes hasta comprar 1.119.000 títulos por un coste total de 13.278.503 euros. Respecto de la rapidez con que ha comenzado este programa, desde Mediaset indican que “no ha habido ninguna aceleración y se está llevando a cabo de manera bastante regular”.

“El programa cumple con todos los requisitos de puerto seguro que contempla la normativa tanto española como europea y se está llevando a cabo al ritmo y en los plazos previstos con fecha límite de vigencia  20 de febrero de 2018”, han indicado.

Mediaset recompró 132 millones entre 2015 y 2016

En febrero de 2016 Mediaset España dio por finalizado su anterior programa de recompra de acciones aprobado en octubre de 2015. En este plan la compañía invirtió 132,6 millones de euros por un total de 14,2 millones de acciones propias, representativas del 3,89% del capital  social.

Esta recompra de acciones ha coincidido con el plan de retribución plurianual dirigido a 27 directivos de la sociedad. El número máximo de acciones que se podrán asignar en cada uno de los tres ejercicios de duración del plan será el equivalente al 0,33% del capital social, de los que el 0,11% corresponderá a los consejeros ejecutivos.

Según la información remitida recientemente por Mediaset a la CNMV, ya  se han asignado los tres primeros paquetes de títulos, que podrán ejecutarse entre julio de 2019 y 2020. Paolo Vasile, consejero delegado, se ha quedado con 66.799 stock options, Massimo Musolino con 9.711 y Mario Rodríguez Valderas con 7.981. En total, 84.491 opciones, cuyo valor no ha trascendido.

'Stock options' para Paolo Vasile

Si valoramos estas acciones al precio al cierre de la jornada de ayer (11,4 euros), vemos que Vasile podría recibir 761.000 euros, Musolino 110.705 euros y Mario Rodríguez 89.957 euros. Según Mediaset, que desliga la recompra de acciones y plan de retribuciones, las stock options para la alta dirección están sujetas a la consecución durante los próximos tres años (2017, 2018 y 2019) de objetivos presupuestarios concretos en términos de facturación publicitaria y free cash flow.

“Transcurrido este plazo, la junta general de accionistas que se celebre en 2020 deberá constatar el cumplimiento de los objetivos establecidos para que se ejecute o no el plan. Con este plan se pretende premiar la estabilidad en la consecución de resultados e incentivar la permanencia y la fidelidad de los directivos en la compañía, comprometiéndose a objetivos a largo plazo”, han indicado a este periódico.

Esta serie de movimientos bursátiles se producen en momentos en que Vivendi decide su futuro en Mediaset Italia, matriz de la compañía. De hecho, fuentes del mercado justifican estas operaciones como una manera de blindar y fortalecer el precio de la acción en un clima de incertidumbre, además de protegerse ante un eventual desembarco de Vivendi en la gestión del operador italiano y las repercusiones que esto podría tener en España. 

Vivendi debe decidir su futuro en Mediaset Italia

En diciembre la operadora francesa sorprendió al mercado aumentando hasta el 20% su participación en el grupo italiano y declarando sus intenciones de seguir creciendo dentro la compañía. Fininvest, el accionista mayoritario de Mediaset, reaccionaba presentando una denuncia en la fiscalía de Milán y otra en la Comisión Nacional para la Sociedad y la Bolsa (CONOB), al mismo tiempo que aumentaba su participación desde el el 34% hasta el 40% del capital.

En medio de toda esta guerra -y después de que Vivendi creciese hasta el 28,8% en Mediaset Italia- el regulador italiano exigió a Vivendi el 19 de abril un plan de acción para reducir su inversión en Mediaset o Telecom Italia en un plazo de un año. Apelando a las reglas de defensa de la competencia, Italia quiere limitar el poder de la operadora francesa que en estos momentos posee el 24% de la teleco italiana y el 28,8% en Mediaset.

Vivendi deberá entregar en una semana su plan definitivo de desinversiones aunque ha trascendido que planea limitar sus derechos de voto en Mediaset para cumplir con una decisión antimonopolio italiana, mientras se prepara para apelar el fallo en el tribunal, dijo una fuente cercana al asunto.

Una apelación que seguiría manteniendo la incertidumbre en España. En estos momentos hay tranquilidad, pero Vivendi ha amenazado con tomar el control de Mediaset Italia si es que el regulador se lo permite. Lo que está claro es que con un nuevo dueño, la situación de Mediaset España podría cambiar radicalmente.