El vicepresidente de Santander España, Juan Manuel Cendoya, ha reconocido que la entidad está buscando soluciones para clientes y accionistas minoritarios del Popular que acudieron a la ampliación de 2016 y que, tras la liquidación del banco, han perdido todo su dinero, al pasar esas acciones a valer cero.
Muchos de ellos, además, recibieron préstamos del propio Popular para acudir a aquella ampliación de 2.500 millones de euros, destinada a limpiar un balance seriamente dañado por una elevada exposición inmobiliaria. Y ahora que esos títulos no valen nada, empiezan a moverse para recuperar esas pérdidas a través de la vía judicial, amparándose en que en el momento de la ampliación, las cuentas del Popular no reflejaban la realidad financiera del grupo.
En el caso de los minoritarios, ya han planteado denunciar por la vía civil a la Junta Única de Resolución (JUR) europea y al Fondo de Reestructuración Ordenación Bancaria (FROB). Pero los expertos anticipan un camino tortuoso para aquellos que opten por esta vía. ¿Tiene toda la pinta de que esto será similar a las demandas por las cláusulas suelo o el arbitraje en el caso de la salida a Bolsa de Bankia. Por la experiencia, también la solución del Santander se quedará a medio camino y no se compensarán todas las pérdidas¿, explica Francisco García, director del área jurídica de Arriaga Asociados.
¿Los afectados no deben pensar que Santander les va a devolver todo su dinero, porque no tiene la obligación legal de hacerlo¿, coincide Nuria Álvarez, analista de Renta 4. ¿Sí habrá una compensación, pero solo por una cuestión de imagen. Estudiarán caso por caso, teniendo en cuenta que en muchos de ellos el dinero se había invertido con la finalidad de ahorrar¿, indica la experta.
Desde CM Capital Markets, el analista Jorge Lage considera que una de las opciones que maneja la entidad para los afectados es `regalarles¿ acciones en la ampliación de capital de 7.000 millones de euros prevista para el mes de julio. ¿Lo más lógico es que no entregue dinero, sino que en la ampliación destine un porcentaje de esas nuevas acciones a los afectados¿, explica el experto, recordando que este movimiento ¿podría servir para atenuar demandas, pero no compensará ni el 10% de las pérdidas, especialmente entre los que invirtieron mayores cantidades de dinero¿.
Además de ir por la vía de la ampliación, Francisco García explica que Santander tiene otras opciones compensatorias, como ofertar productos financieros para los afectados. Sea como fuere, los expertos coinciden: El banco de Ana Botín ¿no tiene por qué pagar nada a nadie¿. Pero a partir de ahí, la entidad se esforzará en buscar una solución que, aunque no compense todas las pérdidas, debería contentar a ambas partes, ¿en un momento en el que su reputación ante sus nuevos clientes y potenciales accionistas está en juego¿.