El pulso que mantienen Bruselas y Google desde hace ya siete años se acerca a su hora decisiva. La Comisión Europea ultima una multa contra el gigante informático que podría superar los 1.000 millones de euros por prácticas monopolísticas en el mercado de búsquedas de internet, según ha adelantado el diario Financial Times, que asegura que la decisión es inminente. De confirmarse, sería la sanción más alta que ha impuesto la UE por abuso de posición dominante.
La multa corresponde al expediente más antiguo que tiene abierto el Ejecutivo comunitario contra Google. En este caso, la comisaria de Competencia, Margrethe Vestager, sostiene que la compañía favorece sistemáticamente en los resultados de las búsquedas a su servicio de comparación de precios (Google Shopping) frente a los rivales. El gigante informático ha replicado que estas acusaciones "son erróneas desde el punto de vista factual, legal y económico". Alega que su posición no es de dominio, ya que compite con otros gigantes como Ebay o Amazon.
Ni la Comisión ni Google han querido comentar la información adelantada por el FT.
El Ejecutivo comunitario mantiene abiertas otras dos investigaciones contra Google por prácticas monopolísticas que van más atrasadas. Una por el sistema operativo móvil Android y otra por la plataforma de anuncios en internet AdSense for Search. Ambas podrían concluir con otras dos multas multimillonarias si se confirman las acusaciones de la Comisión.
Un expediente eterno
Bruselas ha avanzando con una lentitud exasperante en sus expedientes contra Google. La primera investigación se lanzó en 2010 tras años de pesquisas previas. El ex comisario de Competencia, Joaquín Almunia, intentó sin éxito hasta en tres ocasiones alcanzar una solución negociada, sin multas para la compañía. Cuando llegó Vestager corrigió su enfoque, rompió las negociaciones y envió un pliego de cargos. Pero ha tardado otros dos años en completar el caso.
Lo previsible es que ahora Google recurra ante el Tribunal de Justicia de la UE, con lo que el final del expediente se demorará todavía al menos dos años más.
La inminente multa a Google amenaza con hacer aumentar de nuevo las tensiones entre Estados Unidos y la UE. El enfrentamiento alcanzó su cota máxima con la sanción de 13.000 millones de euros que Vestager impuso a Apple a finales de agosto del año pasado en concepto de impuestos atrasados. Bruselas investiga también a otras multinacionales estadounidenses como Amazon o McDonald's. La llegada al poder de Donald Trump ha deteriorado todavía más las relaciones transatlánticas.
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