Nadal ve posible revisar los impuestos a las nucleares para comprobar si son "adecuados"
El ministro de Energía reitera su duda sobre la falta de rentabilidad de las centrales, pero abre la opción de revisar los impuestos fijados en 2012.
19 junio, 2017 16:25Noticias relacionadas
Después de dar una rotunda negativa a los reclamos del sector nuclear en materia de fiscal, el ministro de Energía, Turismo y Agenda Digital, Álvaro Nadal, ha abierto la puerta a un posible análisis para ver si los impuestos que se fijaron en 2012 son "adecuados".
"Hay que hacer un análisis serio. No está mal que hagamos una revisión y veamos qué adecuados son los dos impuestos que pusimos", afirmó el ministro durante su intervención en el seminario 'La cuarta revolución. ¿Cómo afecta la agenda digital a la economía y a la industria?', organizado por la APIE y la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP).
El ministro hizo estas consideraciones al referirse a las discrepancias sobre la rentabilidad de las nucleares que se han manifestado desde las asociaciones del sector, como Foro Nuclear, y desde las propias empresas operadoras, como es el caso de Iberdrola. Según Nadal, es conveniente realizar un análisis económico "serio" sobre las tecnologías hidráulica y nuclear que "revele quién tiene razón".
El ministro de Energía declaró recientemente que el Gobierno no tocaría los impuestos a las nucleares descartando el argumento de la rentabilidad. "Si tenemos en cuenta cómo se ha ido retribuyendo la energía eléctrica en España a partir de los precios de mercado, tengo la sensación de que son más rentables de lo que están diciendo", dijo Nadal en el marco de un encuentro informativo organizado por la Asociación de Periodistas de Información Económica (APIE).
Este lunes ha reiterado su postura y ha señalado además a las cotizaciones en Bolsa que registran las empresas propietarias de las centrales nucleares.
"Las nucleares son las que hay en España. Si se pudiera poner una nuclear cuando se quisiese, se podría ver la rentabilidad", ha indicado Nadal, para quien al afirmar que las centrales nucleares no son rentables "se juega con la falta de conocimiento del regulador, que no tiene un mecanismo de mercado que revele cuánto de rentable es
eso".
Los dos impuestos a los que aludió el ministro se refieren a los de la Ley 5/2012, que entraron en vigor en enero de 2013 y que, entre otras cosas, condujeron a Iberdrola y a Endesa a detener la actividad de la central nuclear de Garoña.
La ley contemplaba varios impuestos a las actividades del sector eléctrico con el objetivo de acabar con el déficit de tarifa. De los gravámenes, dos afectan a la nuclear, que son el que se aplica de forma específica a los residuos y el del 7% a la producción de electricidad. Este último impuesto será analizado por el Tribunal de Justicia de la Unión Europea después de que el Tribunal Supremo haya planteado dudas sobre su constitucionalidad.
Sin nucleares, la luz subiría
Por otro lado, Nadal ha afirmado durante su intervención que la energía nuclear debe mantenerse en el mix energético porque, de no ser así, el recibo de la luz se encarecería un 25%. En la misma línea, el consejero delegado de Endesa, José Bogas, afirmó recientemente que "el cierre de todas las centrales en los próximos 20 años no es factible", ya que encarecería el precio medio de la energía e "incrementaría la pobreza energética de los hogares".
Según Nadal, este impacto sobre el recibo de la luz hace que liberarse de los residuos nucleares sea un coste "excesivo" para la sociedad. "Sube un 25%, porque esa oferta ahora es insustituible con la tecnología que tenemos hoy y con la que tendremos los próximos años".
El ministro ha subrayado que la primera medida necesaria es "la decisión pública de qué mix queremos para los próximos años". "Desde mi punto de vista (la energía nuclear) tiene que contar", ya que, según ha explicado, "hoy por hoy" ni existe ninguna tecnología que consiga trabajar todo el día sin emitir CO2 y a precio de mercado.
La cartera que dirige busca que "no suba el precio" de la electricidad al tiempo que se persiguen los objetivos medioambientales. "El objetivo de otros sí es que suba el precio", ha apuntado y ha matizado que "eso es lógico" y ahí ambas partes no se puden "poner de acuerdo".