Según informó BME, estas participaciones preferentes se emiten conforme a lo previsto en la Ley 10/2014 de ordenación, supervisión y solvencia de entidades de crédito y son computables como capital de nivel 1 adicional del Banco.
El plazo de la emisión es perpetuo, sin perjuicio de que pueden ser amortizadas en determinadas circunstancias a opción de CaixaBank y, en cualquier caso, serán convertidas en acciones ordinarias si el Banco o su grupo presentasen un ratio de capital de nivel 1 ordinario (CET1) inferior al 5,125%.
El nominal unitario de los títulos es de 200.000 euros. Devengarán una remuneración mixta, fija y variable: durante los 7 primeros años un fijo del 6,75% anual y durante cada uno de los siguientes periodos de cinco años la remuneración será el resultado de sumar un margen del 6,498% a un tipo fijado para cada periodo de cinco años, de acuerdo con un índice de referencia de operaciones financieras de derivados (mid-swap) a cinco años.
La emisión está dirigida a inversores cualificados y ha obtenido un rating BB- de Standard & Poor's. Actúan como structuring advisors y joint lead managers, Barclays Bank y Société Générale CIB; como joint lead managers, la propia CaixaBank, J.P. Morgan y Morgan Stanley, y como asesores legales, Linklaters y Allen & Overy.
Julio Alcántara, director general de AIAF, ha resaltado que se trata de la primera emisión de estas características que realiza una entidad financiera en España, "demostrando que el mercado español puede dar cabida a todo tipo de activos, por sofisticados que sean".
Las participaciones preferentes eventualmente convertibles en acciones, conocidas coloquialmente como AT1 o 'CoCos' en el argot financiero, son en realidad unos activos completamente diferentes de las antiguas participaciones preferentes y se emiten para reforzar los ratios de solvencia y el coeficiente de cobertura de liquidez de la entidad.