Con datos a cierre de marzo, Banco Popular contaba con 305.000 accionistas. Y todos ellos han perdido el 100% de su inversión tras la liquidación del banco y su posterior venta al Santander por el valor simbólico de un euro. Unas pérdidas de las que se han librado los tenedores de deuda senior y los depositantes, pero que sí han alcanzado a todos los titulares de CoCos y deuda subordinada que se convirtió en acciones para pasar a valer cero.
Según el documento de resolución del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), se trata de más de 2.000 millones en emisiones de este tipo de deuda. Todo a pérdida tras una intervención de la que la Comisión Europea y el Gobierno español se han mostrado especialmente orgullosos por no haber hecho uso del dinero público.
Pues bien. Ese dinero público que ahora es empleado por Italia para rescatar a dos entidades vénetas, podría salvar incluso a los inversores de deuda subordinada. Según explica Aurelio García del Barrio, Director del Global MBA con especialización en finanzas del IEB, "al igual que en el caso del Popular, sí perderán todo su dinero los tenedores de esa deuda". Pero algunos medios locales han comenzado a apuntar a que Gobierno e Intesa estarían buscando una solución para resarcir, de forma conjunta, a estos inversores.
Algo que ya sucedió con el rescate de Monte dei Paschi. Tras acordar una inyección de dinero público con Bruselas, a cambio de una profunda reestructuración, la entidad ha reconocido que este tipo de deuda subordinada se vendió en algunos casos sin ofrecer toda la información necesaria, con lo que previsiblemente estos titulares serán recompensados por la el banco.
Para los dos bancos vénetos, los medios yexpertos consultados por EFE explican que se estudia la posibilidad de que el Estado reembolse el 80% de las pérdidas en deuda subordinada, mientras que Intesa asumiría el 20% restante.
Se da el caso de que Banca Popolare di Vicenza y Veneto Banca no son entidades cotizadas en Bolsa, por lo que el castigo sufrido por los accionistas del Popular se elimina por esa parte. Tampoco sufrirán pérdidas los depositantes y los tenedores de deuda senior, a los que se atenderá con parte de los 17.000 millones de euros que el Gobierno italiano destinará al proceso de saneamiento de ambas entidades. En el caso del Popular, esa deuda senior que no se ha convertido en acciones la asume ahora el Santander.
Esos 17.000 euros, por cierto, no computarán en la deuda pública del país de este año, pues se incluye dentro de los 20.000 millones de euros provisionados por el Gobierno el pasado año para hacer frente a este tipo de crisis bancarias.