El grupo que preside Rafael del Pino potencia con este proyecto la destacada presencia con que cuenta en Polonia, uno los sus principales mercados de construcción, en el que opera a través de Budimex.
El contrato logrado ahora con la compañía operadora de los ferrocarriles polacos consiste en modernizar dos tramos de la línea ferroviaria que enlaza Varsovia y Dorohusk, en la frontera ucraniana.
En el primer tramo, de 51,7 kilómetros de longitud, acometerá la instalación de nuevas vías y cantenarias, un nuevo sistema de control y la reforma de 38 estructuras, como puentes, pasos elevados y túneles.
En el segundo tramo, de 30 kilómetros de longitud, Budimex trabajará junto con Ferrovial Agromán en mejorar las vías y tres estaciones, además de construir nuevos andenes, desvíos y puestos de señalización, y mejorar estructuras.