La cifra de negocio de BlackRock sumó un total de 2.965 millones de dólares (2.587 millones de euros), un 5,7% más que un año antes, con un crecimiento del 7,5% en los ingresos por comisiones de asesoría, administración y préstamo de valores, mientras los ingresos por comisiones de asesoría vinculadas al rendimiento bajaron un 35%.
De este modo, en los seis primeros meses del ejercicio la gestora obtuvo un beneficio neto atribuido de 1.719 millones de dólares (1.500 millones de euros), un 18,9% más que en la primera mitad de 2016, mientras sus ingresos aumentaron un 6,6%, hasta 5.789 millones de dólares (5.052 millones de euros).
"Los resultados del segundo trimestre de BlackRock reflejan la confianza que nuestros clientes siguen depositando en nuestra plataforma tecnológica e inversión global", declaró Laurence D. Fink, presidente y consejero delegado de BlackRock. "Aunque una liquidez significativa permanece en los márgenes, los inversores han comenzado a poner a trabajar sus activos", añadió.