El acuerdo amistoso entre los dos laboratorios podría "perjudicar gravemente" a los pacientes en la Unión Europea y a los presupuestos de los servicios de salud de los Estados miembros, según ha advertido el Ejecutivo comunitario en su investigación preliminar, iniciada en abril de 2011.
"Las empresas pudieron retrasar la entrada en el mercado de un medicamento genérico menos caro, lo que ha llevado a precios más elevados del modafinil", de acuerdo al análisis de Bruselas.
En un primer momento, Teva comercializó durante un breve periodo su versión genérica en Reino Unido, cuando expiraba la patente de Cephalon, pero en octubre de 2012 las dos firmas alcanzaron un acuerdo de "pago por retraso" y Teva dejó de vender el medicamento genérico.
Bruselas ha dirigido el pliego de cargos a Teva (Cephalon se convirtió en filial de la farmacéutica israelí en 2011) y la empresas y otras partes interesadas pueden ahora analizar la documentación y presentar sus argumentos. No existe un plazo legal para el fin de la investigación por parte de la Comisión Europea.
Entre 2008 y 2009, Bruselas ya llevó a cabo una amplia investigación sobre el sector farmacéutico, que puso de relieve el peligro de que algunos acuerdos amistosos en materia de patentes entre laboratorios y fabricantes de medicamentos genéricos, cuyo objetivo es retrasar la entrada de estos fármacos.