Reyal Urbis cerró el primer semestre del ejercicio actual con unas pérdidas netas de 79,78 millones de euros, lo que supone incrementar un 4,3% los 'números rojos' de 76,42 millones de euros contabilizados en los mismos meses del año anterior.
La compañía se encuentra en proceso de liquidación después de pasar más de cuatro años en concurso de acreedores y de que no prosperara la propuesta de pago de deuda planteada a sus acreedores, entre los que se encuentran Hacienda y la Sareb.
La empresa que dirige Rafael Santamaría registró un volumen de negocio de 18,7 millones de euros durante la primera mitad del ejercicio actual, lo que representa una disminución del 21,7% si se compara con los mismos meses del año previo.
Entre enero y junio de este año, Reyal Urbis contabilizó un resultado bruto de explotación (Ebitda) negativo de 7,46 millones de euros, lo que supone triplicar los 'números rojos' registrados en el mismo período de 2016.
La compañía finalizó los seis primeros meses del ejercicio actual con unas pérdidas antes de impuestos de 80,73 millones de euros, lo que supone un aumento del 4,1% en comparación con las cifras negativas del primer semestre del año previo.