Cebrián tiene un año para restablecer el equilibrio patrimonial de Prisa
- El grupo está en causa de disolución, por lo que debe mover ficha cuanto antes realizando desinversiones, comprando deuda o ampliando capital.
Noticias relacionadas
- Alierta, entre armenios y aragoneses: triple A para quitarle Prisa a Cebrián
- El “milagro” de Santillana que salva los resultados semestrales de Prisa
- Telefónica considera su inversión en Prisa como "disponible para venta"
- Cadena Ser gana 16 millones, un 25% menos, tras integrar cinco sociedades
- OJD: las ventas de ‘El País’ caen un 20% en otro semestre negro del papel
Prisa, editor de El País, Cadena Ser y Santillana, ha reconocido en sus cuentas semestrales que deberá realizar en el plazo de un año “desinversiones parciales o totales de activos, compraventas adicionales de deuda con descuento, apalancamiento de activos operativos u operaciones corporativas tales como una ampliación o reducción de capital”.
En la práctica esto significa reconocer que necesitan liquidez de manera urgente para poder restablecer el desequilibrio patrimonial generado por la venta de Media Capital a Altice, una operación que también deberá ayudar a pagar los 956,5 millones de euros del tramo 2 de la deuda de Prisa que vence en diciembre de 2016.
La situación no es fácil para Juan Luis Cebrián, presidente del grupo, que como contamos en EL ESPAÑOL, siente el aliento de César Alierta en su nuca. El expresidente de Telefónica no ha desistido en su intención de hacerse con el control de Prisa -con el apoyo de Amber Capital y Heraldo de Aragón- y para ello es fundamental apear a Cebrián de la presidencia de la compañía.
Cualquier movimiento puede agitar al consejo
La actual situación de desequilibrio patrimonial de Prisa no es una buena noticia para Cebrián, ya que le obliga a mover ficha y realizar alguna operación que le permita obtener liquidez. Las opciones pasan por vender algún activo -solo le queda Santillana, algún diario o emisoras de radio- o una compleja operación financiera que necesariamente necesitaría la aprobación de un convulso consejo de administración, con Amber pidiendo desde febrero la salida del presidente ejecutivo.
La sociedad ha reconocido en sus cuentas que, a 30 de junio de 2017, su patrimonio neto es de 141,6 millones de euros, importe inferior a las dos terceras partes de la cifra del capital social. Si bien el patrimonio se sitúa por encima de la mitad de este capital, Prisa se encuentra técnicamente en una situación de desequilibrio patrimonial y por tanto en causa de disolución.
La Ley de Sociedades de Capital establece que este desequilibrio debe ser restablecido en un año (dos meses si el desfase es de más de la mitad del capital, algo que no le pasa a Prisa) de lo contrario la la sociedad deberá disolverse al finalizar este plazo.
Desequilibrio generado por Media Capital
Prisa ha reconocido que el desequilibrio se debe a la venta de Media Capital que se traducirá en el registro de una pérdida contable de aproximadamente 81,4 millones de euros en sus cuentas individuales.
Si bien el precio de la operación se anunció en 440 millones de euros, el valor aproximado de acuerdo a las estimaciones de la compañía se ha realizado en torno a los 321,4 millones. “El precio final dependerá de la evolución del negocio de Media Capital hasta la fecha en que se materialice la venta”, ha indicado Prisa en sus cuentas semestrales.
Respecto de la deuda, el endeudamiento neto bancario del Grupo creció en 57,1 millones en el año y se sitúa en 1.543,3 millones a junio de 2017. No obstante, en sus cuentas la compañía declara pasivos financieros totales por valor de 1.889 millones de euros.
Desequilibrio patrimonial tras la venta de DTS
Por vencimiento, el tramo 2 de la deuda, fijado en 956,5 millones, debe pagarse antes de diciembre de 2018. El tramo 3 tiene vencimiento en el ejercicio 2019 y su coste es de 176,9 millones.
Hay un tercer tramo de deuda denominado préstamo participativo (PPL) “que se originó con el fin de restablecer el equilibrio patrimonial de Prisa tras el registro de las pérdidas derivadas de la operación de venta de DTS”.
Esto refleja que no es primera vez que Prisa queda en desequilibrio patrimonial. Ya lo hizo tras la venta de Sogecable en 2015, salvando la disolución convirtiendo parte de esta deuda en préstamos participativos. En total, el pago del PPL es de 439,7 millones.
Prisa reportó beneficios de 13,9 millones de euros en el primer semestre del año. Estos datos se comparan con los 10,5 millones que perdieron en el primer semestre de 2016. El Ebitda creció hasta los 118,5 millones, un 37% más y el Ebit (resultados operativos netos) llegó a los 79,9 millones, un 77% de crecimiento.