El beneficio neto de explotación (ebit) subió un 1 % hasta 490 millones, mientras que el beneficio bruto de explotación (ebitda) fue casi idéntico al de un año atrás, con 699 millones.
La facturación entre enero y junio ascendió a 4.091 millones, lo que supone un aumento del 2 %.
La potencia producida fue de 5.466 megavatios, frente a los 4.716 de un año atrás, y la potencia instalada, de 3.387 megavatios, por 3.705 en el mismo período de 2016.
Vestas ganó 186 millones netos en el segundo trimestre, un 33 % peor y por debajo de las previsiones de las analistas.
El ebit y el ebitda cayeron un 30 y un 24 % hasta 279 y 398 millones, respectivamente.
La eólica danesa facturó entre abril y junio por valor de 2.206 millones, un 14 % menos interanual.
La potencia instalada fue de 3.095 megavatios (2.902 un año antes), y la instalada, de 1.834 megavatios (2.491).
"En un mercado cambiante Vestas presentó otro trimestre sólido con buenas ganancias y mantuvo su liderazgo. El balance mostró una mejora en los pedidos en todas las regiones, una cartera mayor, buen resultado en servicios y una facturación semestral a la par que en 2016", dijo en un comunicado su director ejecutivo, Anders Runevad.
Las acciones de Vestas caían un 7 % en la Bolsa de Copenhague a las 07.49 GMT.