Protagonizó una de las ventas más importantes del panorama tecnológico en España en el año 2014. El agregador de anuncios clasificados español Trovit fue vendido al gigante japonés del sector Next CO por 80 millones de euros. Ahora, dos años después, la compañía se enfrenta a su primer gran frenazo en los ingresos y al bloqueo de un plan de retribución a determinados empleados por no cumplir con las previsiones de rentabilidad.
La compañía no dejó de crecer durante los últimos años. El crecimiento fue ininterrumpido, incluso, bajo el paraguas de Next CO (ahora llamada Lifull). Sin embargo, el pasado ejercicio 2016 cambió la tendencia, según se refleja en las cuentas recién presentadas en el Registro Mercantil.
La sociedad cerró el año con 25,7 millones de euros, frente a los 25,6 millones de un año antes. El estancamiento contrasta con los crecimientos de años anteriores: un 55% en 2012, un 20% en 2013; un 28% en 2014 o un 13% en 2015.
Este frenazo se complementa con una caída significativa en la rentabilidad, una de las mayores fortalezas de la empresa en los últimos años y uno de los grandes baremos que medían la entrega de un plan de retribución a determinados empleados. En concreto, cerró el ejercicio con un descenso del 16,5% en el resultado de explotación y de un 19% en el beneficio neto.
El plan de retribución, en el aire
Una de las consecuencias de esta caída en los beneficios de la empresa está relacionada con la retribución a los empleados. En el año 2015, la empresa aprobó un plan de retribución establecido a determinados empleados y “en base al cumplimiento de ciertos objetivos, entre los que se encontraba alcanzar un determinado Ebitda y rendimiento individual a cada trabajador”. Ese plan estaba valorado en 2,1 millones de euros que se pagaría a lo largo del año 2017, según queda reflejado en su memoria.
Ante esta situación, la empresa provisionó 654.000 euros, “correspondiente a la parte devengada por dicho plan de retención durante el ejercicio 2015”. Sin embargo, los nuevos dueños han evaluado el grado de cumplimiento del plan y “puesto que no se cumplían las condiciones fijadas, se ha procedido a revertir dicha provisión”.
Es llamativo el incremento del equipo de la compañía. De los 98 empleados con los que cerró el ejercicio 2015 ha pasado a 157. Los gastos de salarios sumaron 4,5 millones de euros (un 18% más). En parte se compensó con la reversión de la provisión para el plan de retribución. Pero no es el único gasto que se incrementa significativa.
La propia dueña de la empresa admite en el balance del año 2016 que incrementó el gasto de publicidad (incluido en ‘Otros gastos de explotación’). En concreto, en la memoria de la empresa, se especifica que en el epígrafe de ‘Servicios Exteriores’ se pasa de 11,8 a casi 14 millones de euros en un año. “Esta partida incluye, principalmente, cuotas de arrendamientos y compra de tráfico web realizada por la sociedad”, aseguran.
La sociedad, fundada en el año 2006 por Iñaki Ecenarro, Daniel Giménez y Raúl Puente como uno de tantos experimentos llevado a cabo por un grupo de personas que se había concido en el Grupo Intercom -incubadora de startups con sede en Barcelona y cuna de iniciativas como Softonic o Infojobs-. Tras la venta, una parte de su negocio se vinculaba con Next CO al operar ya como una filial. Es decir, 8 millones de euros de sus ventas se hicieron a Next CO, mientras que la japonesa les prestó servicios de todo tipo por casi 1,2 millones de euros.
"Recuperación estable"
Una de las razones que hay detrás de esta caída del negocio es una reducción significativa del tráfico que Lifull reconocía en varios documentos a inversores. Sin embargo, el pasado mes de agosto señalaban una “recuperación estable” en ese tráfico en la primera parte de este año 2017, a pesar de las caídas estacionales que ellos mismos señalan.
El agregador español, según los últimos datos ofrecidos por Lifull, contaba con más de 200 millones de anuncios clasificados incluidos, centrados principalmente en el sector inmobiliario, los recursos humanos y los coches usados.
Más dividendo
Uno de los aspectos que no ha cambiado en el ejercicio 2016 para la sociedad española es su política de dividendos. Trovit ha sido una compañía que, tradicionalmente, ha retribuido a sus socios año tras año.
En 2015 hubo un cambio. Tras el dividendo de 7,4 millones de euros (con cargo a reservas voluntarias) y de algo más de un millón de euros con cargo a los beneficios de 2014 tras la venta, decidieron no repartirlo. En 2016 lo han recuperado: 2,2 millones de euros.
Una venta rentable
Next Co sacó la chequera en 2014 para hacerse con una de las ‘startups’ históricas del panorama español. Una compañía que apenas recibió 150.000 euros de capital privado del fondo Cabiedes & Partners.
Fue una operación que se pagó en efectivo. Cabiedes recibió unos 8 millones de euros, mientras que los tres cofundadores -que contaban con participaciones de entre el 20 y el 30 por ciento- se repartieron gran parte del resto.