Tubos dijo que en el segundo trimestre ha desinvertido su negocio de distribución nacional, teniendo que anotarse 3,6 millones de euros de pérdidas por operaciones interrumpidas.

"La depreciación del dólar ha supuesto unas diferencias de cambio negativas de 1,8 millones de euros en el trimestre lo que supone unos peores resultados financieros que alcanzan 4,2 millones de euros negativos en el periodo", agregó Tubos.

Las ventas subieron un 58 por ciento en el semestre a 163,5 millones de euros, mientras que el resultado operativo bruto (EBITDA) mejoró un 901 por ciento a 16 millones de euros.

Tubos augura que las ventas continuarán a buen ritmo en los próximos meses dada la cartera de pedidos que registran. No obstante, espera una erosión en el margen EBITDA en el segundo semestre del año debido al aumento del coste de la materia prima y los menores ingresos por la depreciación del dólar.

La empresa dijo que estaba reanudando gradualmente la producción en Estados Unidos tras el paso del huracán Harvey. El mayor problema es la escasez de personal, dado que el 30 por ciento de la plantilla tiene dificultades de acceso a la planta por los efectos de la tormenta.