En una rueda de prensa ofrecida hoy en Salamanca, el directivo de la multinacional australiana ha insistido en que la filosofía de la compañía es el "respeto por el medio ambiente", el "respeto por la seguridad y la salud de las personas", el "apoyo a las comunidades locales" y la "transparencia del proyecto".

Francisco Bellón ha considerado que los argumentos e informaciones aportadas por organizaciones contrarias a la construcción de la mina "distorsionan la realidad del proyecto".

El directivo de Berkeley ha insistido en que la empresa "dispone de más de 100 informes y permisos favorables para el comienzo de la fabricación", por lo que ha dado por "resueltas" las dudas sobre el posible peligro medioambiental y de salud.

En este sentido, ha puesto "las dos manos" en el fuego al afirmar que desde Berkeley se ha "desarrollado un proyecto de manera rigurosa", para lo que se han basado "en todo tipo de normativa" en relación con las instalaciones radiactivas.

"No va a afectar ni a los valores protegidos de la zona ni a la salud de las personas. Pondría las dos manos en el fuego", ha asegurado Francisco Bellón, quien ha recordado que existen informes en ese sentido "por parte del Consejo de Seguridad Nuclear".

Hasta el momento, Berkeley ya ha invertido en torno a 75 millones de euros y se han contratado a 70 personas, la mayoría "de la zona", por lo que en su opinión "se está cumpliendo con el compromiso de fomentar el empleo local" y ha augurado que en unos años en esta zona de la provincia de Salamanca "habrá desempleo cero".

Además, ha reconocido que "la construcción de la mina será inmediata", con unas obras que concluirán "en un periodo entre 18 y 20 meses" y, a partir de ese momento, estarán "en disposición de comenzar la producción".

Francisco Bellón no ha entendido la moción que va a llevar al pleno del Ayuntamiento de Salamanca la formación Ganemos, para oponerse a la mina de uranio, ya que "está carente de justificación" y también ha mostrado su sorpresa por las críticas del Ayuntamiento de Villavieja de Yeltes, en la zona de una posible expansión de la mina, ya que "no conocen el proyecto porque no han querido reunirse con nosotros".

Este directivo de Berkeley ha dejado claro que "no ha estado en la mente de la compañía abandonar" ni la empresa "se plantea dejar el proyecto a la mitad".